Esta luna es conocida como del cazador o luna de sangre pues se cree que es el momento perfecto para la cacería, ya que los animales comienzan a ganar peso antes del invierno saliendo a buscar alimento en campos de cultivo recién vaciados, momento clave donde los cazadores pueden verlos fácilmente por la luz de la luna.
El nombre es originario de tribus norteamericanas. En 1710 fue citado por primera vez en el Oxford English Dictionary como Hunter’s Moon o Blood Moon (Luna de Sangre).
La luna llena adquiere un color naranja al acercarse al horizonte y ocultarse. Tiene ese color debido a atmosfera de la tierra la cual se vuelve más espesa en el horizonte, dispersando la luz azul, pero dejando pasar la luz roja.
FOTO: MARGARITO PÉREZ RETANA / CUARTOSCURO La también conocida como Luna de Sangre, logró verse en diversas partes de la República Mexicana cuando el cielo del 20 de octubre alcanzó su máximo tono oscuro.
FOTO: MARGARITO PÉREZ RETANA / CUARTOSCURO Se cree que las lunas de octubre son las más grandes del año, sin embargo el tamaño del satéñite natural dependerá de su cercanía con la tierra.
FOTO: MARGARITO PÉREZ RETANA / CUARTOSCURO El perigeo consiste en la distancia máxima en la que tenemos más cercana la luna, esto equivale a 384 mil 400 kilómetros de la Tierra, razón por la que se logra apreciar de mayor tamaño.
FOTO: MARGARITO PÉREZ RETANA / CUARTOSCURO Por el contrario, el apogeo corresponde a la distancia máxima en que la luna se encuentra alejada de la tierra, alcanzando los 405 mil 696 kilómetros.
FOTO: MARGARITO PÉREZ RETANA / CUARTOSCURO La luna en su fase creciente se muestra en la ciudad fronteriza de Tijuana.
FOTO: OMAR MARTÍNEZ /CUARTOSCURO MÁS GALERÍAS: