Los miembros de la Generación Z transforman el lugar de trabajo en Estados Unidos con su enfoque emprendedor y transparencia

A medida que los más jóvenes cumplen 17 años y los mayores 27 este año, los miembros de la Generación Z han crecido. Tienen opiniones claras sobre cómo debe realizarse el trabajo y sus voces cada vez se escuchan más fuerte. Este año, se anticipa que la Generación Z superará a los baby boomers en la fuerza laboral de Estados Unidos, sobrepasando los 17 millones, mientras que el número de trabajadores boomers sigue disminuyendo.

Muchos estadounidenses de la Generación Z están avanzando en su primer o segundo trabajo después de la educación superior, dejando a Estados Unidos con aproximadamente cuatro generaciones distintas trabajando activamente en la economía. Mientras la entrada de la Generación Z aporta una nueva perspectiva a la fuerza laboral, esta generación trabaja de manera diferente a las anteriores. Sus expectativas de transparencia y autenticidad, así como su inclinación hacia el emprendimiento, pueden generar fricciones con colegas más veteranos.

Los líderes empresariales deben dejar de intentar asimilar a los miembros de la Generación Z y, en cambio, enfocarse en aprovechar sus diferencias como una ventaja. Comprender la filosofía de trabajo de los miembros de la Generación Z y su naturaleza emprendedora es el primer paso para capitalizar sus habilidades y ayudarles a trabajar de manera armoniosa con generaciones más antiguas.

Trazando su propio camino Según el estudio Gen Z Live Work Play de Ernst & Young LLP, más de la mitad de la Generación Z (52%) tiene dos o más fuentes de ingresos. Mientras que las generaciones anteriores a menudo dependían de trabajos a tiempo parcial en lugares físicos, como puestos en tiendas o restaurantes, la Generación Z tiene acceso y sabe cómo ganar dinero a través de canales digitales y sociales. Son rápidos para explorar estos canales en busca de nuevas y múltiples oportunidades para generar ingresos.

Sin embargo, aunque muchos piensan que los miembros de la Generación Z son más similares a sus homólogos millennials, en realidad sus valores son más parecidos a los de la Generación Silenciosa. Al igual que los nacidos entre 1928 y 1945, la Generación Z también ha crecido con incertidumbre financiera, guerras y turbulencias políticas. Los miembros de la Generación Z han visto a sus padres luchar en la Gran Recesión, un mercado laboral incierto y crisis de vivienda, así como, más recientemente, una pandemia global y crecientes tensiones sociopolíticas.

Estos desafíos continúan moldeando de manera única cómo los miembros de la Generación Z perciben su entorno. En nuestros colegas más jóvenes, vemos personas independientes y enfocadas en el futuro, que se esfuerzan por la estabilidad financiera y la satisfacción en su trabajo. Acostumbrados a experimentar situaciones difíciles, buscan proactivamente soluciones para los problemas y encuentran formas de superar los obstáculos.

Si bien su naturaleza independiente, proactividad e inclinación por explorar múltiples oportunidades de ingresos pueden parecer desinteresadas o poco comprometidas para los trabajadores mayores, los miembros de la Generación Z son trabajadores arduos y tienen altas expectativas para sí mismos.

Para obtener el mayor beneficio de los miembros de la Generación Z, los gerentes deben dejar de obligarlos a encajar en un molde. En cambio, deben considerar cómo se pueden aprovechar sus espíritus emprendedores.

Permítanles escuchar e implementar sus opiniones en los proyectos y, fomente campos de juego nivelados donde puedan colaborar directamente con otras generaciones y no enviar ideas “a través de la cadena de mando”. Los miembros de la Generación Z están naturalmente orientados a identificar y superar ineficiencias y obstáculos; déjelos hacerlo. Los líderes pueden descubrir que ayudan a crear una cultura de trabajo más transparente y directa, que produce resultados reales.

Criados en una era de escepticismo Estamos en una era de información enfrentada, con diferentes enfoques para recopilar, analizar, interpretar y compartir perspectivas. La Generación Z es la primera generación de estadounidenses que crece en esta era, y esto ha tenido un enorme efecto en cómo procesan y confían en la información.

Según un estudio de Gallup, menos del 20% de los estadounidenses de la Generación Z confían “mucho” o “bastante” en lo que leen en internet, con la mayoría (58%) confiando solo “algo” en la información.

Este escepticismo inherente entre los jóvenes estadounidenses puede convertirse en un superpoder en el contexto adecuado. Los emprendedores exitosos deben cuestionar las normas comerciales regularmente para encontrar nuevos mercados y diferenciar sus ofertas. Cuestionar el status quo es algo natural para la Generación Z. Estamos ansiosos por los nuevos negocios que pueden establecer como resultado de su curiosidad. Por ahora, los líderes empresariales que abracen la naturaleza rebelde de la Generación Z pueden obtener una ventaja competitiva al ver los espacios en blanco que aquellos más conformes con las normas actuales pasarán por alto.

Fomentar este rasgo emprendedor en beneficio de la empresa y permitir que la Generación Z haga preguntas y sugiera alternativas podría llevar a un gran avance. Y si no es así, aún ayuda al equipo a pensar sobre los temas de manera diferente, lo que podría producir una ventaja fresca más adelante.

Altos estándares La Generación Z tiene altos estándares, para ellos mismos y para los demás. Están profundamente enfocados en ser fieles a sí mismos y exigen lo mismo a su empleador. El noventa por ciento de los estadounidenses de la Generación Z sitúan la autenticidad, o ser fiel a uno mismo, entre sus valores más altos. Además, el 73% piensa que es muy importante que los empleadores compartan sus valores, incluyendo pago justo, empatía, priorizar las necesidades de los empleados sobre las ganancias, salud mental y diversidad.

Las empresas que son honestas y abiertas con sus empleados y clientes ganarán el respaldo de sus partes interesadas más jóvenes. Aquellas que no lo sean serán indudablemente cuestionadas por los estadounidenses de la Generación Z, que no temen alzar la voz contra las injusticias percibidas.

La Generación Z está forzando a que temas que alguna vez fueron tabú se conviertan en parte del diálogo común para todas las generaciones, como la inequidad social y el bienestar financiero. Como resultado, las empresas están reexplorando sus culturas y paquetes de beneficios, reconociendo conceptos como la transparencia salarial y el bienestar financiero general como temas importantes para los empleados.

Para los líderes empresariales, es importante entender mejor cómo funciona la Generación Z y cómo son diferentes de sus pares para ayudar a los trabajadores de todas las edades a desempeñarse de manera cohesionada. El deseo de la Generación Z por una comunicación abierta, cuestionar las normas, pensar de manera contracorriente y sus altos estándares personales son características de empleados impactantes y emprendedores de alto crecimiento, independientemente de la edad.

Un asombroso 42% de los estadounidenses de la Generación Z dicen que probablemente inicien su propio negocio algún día. Es muy probable que nuestros colegas más jóvenes pronto estén dictando el mundo empresarial, incluso mientras las generaciones mayores aún están trabajando.

Sin duda, hay más por aprender, pero prestar atención a los atributos únicos de la Generación Z ahora pagará dividendos, tanto para los líderes empresariales como para nuestra economía global.

Marcie Merriman es Líder de Estrategia de Clientes e Insights Culturales de EY Americas. Lee Henderson es Líder de EY Private para las Américas. Las opiniones reflejadas en este artículo son las de los autores y no necesariamente reflejan las opiniones de Ernst & Young LLP u otros miembros de EY global.

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