La galardonada con el último Premio Nobel de Economía, la profesora Claudia Goldin, ha analizado 200 años de datos sobre las diferencias salariales entre hombres y mujeres, y ha demostrado que la actual brecha salarial puede atribuirse principalmente a las responsabilidades del cuidado de los hijos.
Dichas responsabilidades suelen recaer desproporcionadamente en las mujeres, debido sobre todo a los roles tradicionales de género que han persistido durante generaciones en muchas culturas de todo el mundo. Estos roles han perpetuado la expectativa social de que las mujeres son las principales cuidadoras en los hogares. Una semana laboral de cuatro días ofrece la oportunidad de animar a los padres a participar de forma más equitativa en el cuidado de los hijos.
Goldin señaló que tanto hombres como mujeres empiezan en igualdad de condiciones, pero la brecha se ensancha cuando nacen los hijos, y entonces las mujeres siguen soportando una gran parte de la carga. Del mismo modo, McKinsey y LeanIn concluyeron en su informe, en el que encuestaron a más de 200 empresas, que las mujeres siguen viéndose frenadas en el lugar de trabajo por factores como las expectativas en cuanto al cuidado de los hijos. En resumen, la participación de la mujer en la mano de obra sigue siendo baja, y la diferencia salarial entre hombres y mujeres sigue siendo un problema importante.
No hay mejor momento que éste para introducir una semana laboral de cuatro días. Una semana laboral más corta es una solución transformadora que puede empoderar a los empleados proporcionándoles la flexibilidad que necesitan para compaginar eficazmente el trabajo y las responsabilidades de cuidado, cerrando la brecha salarial de género y lo que es más importante, reduciría la brecha entre las mujeres que trabajan a tiempo parcial debido a las responsabilidades familiares y de cuidado de los hijos y sus colegas a tiempo completo.
Responsabilidades del cuidado de los hijos
La ventaja más evidente de una semana laboral de cuatro días es el día libre adicional. Este día extra proporciona a las mujeres el regalo del tiempo, permitiéndoles pasar más momentos de calidad con sus hijos. Por ejemplo, una madre que antes salía a trabajar temprano por la mañana y volvía tarde por la noche dispondría de un día completo adicional para establecer vínculos afectivos, jugar y relacionarse con sus hijos. Los beneficios emocionales son inconmensurables.
La plataforma de financiación colectiva Kickstarter introdujo un fin de semana de tres días para promover un equilibrio más saludable entre trabajo y vida privada. El impacto más profundo registrado fue para los padres jóvenes, en particular las mujeres, que obtuvieron un tiempo inestimable para pasar con sus hijos en sus primeros años.
Conciliar la vida laboral y familiar puede ser estresante y provocar agotamiento y problemas de salud mental. El horario comprimido de la semana laboral de cuatro días puede reducir significativamente los niveles de estrés al proporcionar fines de semana más largos, lo que permite a las mujeres recargar las pilas y recuperarse. Esto se traduce en cuidadoras más felices y sanas que pueden estar más presentes y comprometidas con sus familias y en el trabajo.
Microsoft Japón informó de un aumento de la productividad del 40% como parte de su Work-Life Choice Challenge, lo que demuestra que una semana laboral más corta puede conducir a un trabajo más centrado y eficiente. Este aumento de la eficiencia benefició directamente a las mujeres con responsabilidades de cuidado de niños, ya que redujo el estrés asociado a la gestión del trabajo y la vida familiar.
Estancamiento profesional
Uno de los retos importantes para las mujeres con responsabilidades de cuidado de niños es el riesgo de estancamiento profesional. A menudo, las mujeres se ven obligadas a reducir sus horas de trabajo o a hacer un paréntesis en sus carreras para cumplir con sus responsabilidades como cuidadoras. La semana laboral de cuatro días puede ser decisiva para que las mujeres continúen sus carreras sin grandes interrupciones y puede permitir retener el talento femenino.
La política All Roles Flex de Unilever es un buen ejemplo de empresa que apoya activamente a las mujeres con responsabilidades en el cuidado de los hijos. Esta política ofrece a todos los empleados opciones de trabajo flexible, incluidas semanas laborales más cortas. El compromiso de Unilever con la flexibilidad ha contribuido a crear un equipo directivo más diverso y equilibrado entre hombres y mujeres.
La semana laboral de cuatro días no es sólo un cambio de horario: es un muy buen esbozo de cómo debería ser el futuro del trabajo. Ofrece una solución convincente para las mujeres con responsabilidades de cuidado de niños, permitiéndoles gestionar mejor sus familias y sus carreras profesionales.
Las organizaciones que adoptan una semana laboral de cuatro días envían un mensaje poderoso: están comprometidas con la igualdad de género y apoyan las diversas necesidades de sus empleados. Al empoderar a las mujeres con responsabilidades de cuidado de niños, no sólo estamos creando una mano de obra más inclusiva y equitativa, sino también una sociedad mejor.
Ha llegado el momento de que las empresas, los responsables políticos y los empleados defiendan la semana laboral de cuatro días como medio para empoderar a las mujeres, especialmente a las que tienen responsabilidades en el cuidado de los hijos, creando un mundo en el que las mujeres puedan prosperar en sus carreras mientras cuidan de sus familias. No se trata sólo de una aspiración: Es una realidad práctica.
Mansoor Soomro es investigador sobre el futuro del trabajo y contribuye regularmente al debate sobre la semana laboral de cuatro días, la resiliencia, la sostenibilidad y la inteligencia artificial. Dirige la unidad de investigación sobre el futuro del trabajo de la Escuela Internacional de Negocios de la Universidad de Teesside.
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