World of Warcraft: Dragonflight, la gallina de los huevos de oro de Blizzard

La última expansión logró revitalizar la saga y continúa la producción de contenidos excepcionales para atraer y retener jugadores

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Desde el 2004 no hay un año en el que no hablemos de World of Warcraft. Este MMORPG vino a cambiar la forma de jugar videojuegos y al día de hoy, con una base de millones de jugadores activos, sigue siendo un motor importantísimo en lo que respecta a gaming de PC. Si llegaron hasta acá sin tener idea de qué se trata este título, fácilmente lo podemos resumir en “una epopeya de guerra”. En la historia de World of Warcraft, hay dos facciones principales: la Alianza y la Horda. La Alianza está compuesta principalmente por humanos, enanos y elfos, mientras que la Horda está formada por orcos, trolls y tauren, entre otras razas. Cada bando tiene su propio origen y motivaciones, y ambas están en constante conflicto.

La trama de World of Warcraft comienza con la llegada de los orcos a Azeroth a través de un portal oscuro, traídos por su líder, el brujo Gul’dan. Los orcos, sedientos de poder y ansiosos por conquistar nuevas tierras, dan inicio a una lucha contra los habitantes de Azeroth, lo que desencadena una guerra que dura varios años. El argumento se desarrolla a lo largo de varias expansiones, cada una con su propia trama y ambientación. Los jugadores pueden unirse a una facción y devastarse mutuamente en batallas épicas en tierra y mar, explorar mazmorras, hacer misiones o descubrir secretos y tesoros ocultos en el vasto mundo.

Ya sumergiéndonos en la actualidad de este multijugador masivo, a finales del año 2022 les contamos todo acerca de Dragonflight, la novena expansión que Blizzard Entertainment preparó para los fans. En aquel entonces les narramos todas las novedades que aterrizaron, incluída la incorporación de una nueva raza o clase híbrida llamada Dracthyrs y la enorme ampliación del lore vinculado a los Vuelos Dragón, deidades que formaron parte de la creación de este universo.

Lo más rico de este último DLC es que no cae en la repetición y se enfoca en recrear la nostalgia de las originales y más exitosas entregas. Por primera vez en mucho tiempo, vemos cómo World of Warcraft decide no ofrecer assets o mecánicas recicladas y venderlas como nuevo contenido. Honestamente, en Dragonflight se aprecia un rework de muchos pilares del game design que efectivamente atrae al público que se tomó una pausa de la suscripción. También retiene felizmente a los gamers que todavía se sostenían de Shadowlands, la octava expansión.

Hemos tenido la posibilidad de acceder a un evento virtual con los desarrolladores de esta obra y nos han contado de primera mano cómo fue involucrarse en el complejo desafío de seguir ofreciendo contenido a un juego a lo largo de 18 años. Precisamente fue Ion Hazzikostas, Game Director de Dragonflight, quien charló con nosotros sobre varios puntos. Los highlights de la entrevista estuvieron dados por el inmenso parche 10.1, que continúa directamente del 10.0.7 y viene a mover fuertemente el tablero virtual una vez más. Este nuevo update está disponible desde el mes de marzo y trae consigo numerosas características que prometen añadir más horas de diversión tanto en solitario, como en compañía de otros champions. Vamos directamente a ellas, esquivando los detalles del arco principal para evitar spoilers y arruinarles la sorpresa:

Nueva zona: Caverna Zaralek

Esta área es tan grande que tiene más de tres biomas dentro de sus terrenos. Los gamers podrán descubrir tesoros ocultos y luchar contra nuevas bestias élite. Esta zona subterránea alberga enemigos de todo tipo, pero también determinadas criaturas que van a ayudarnos para abrirnos paso ante la nueva línea de misiones. Adicionalmente, varios minijuegos se habilitan, como por ejemplo las carreras de caracoles, organizados por los humanoides drogbar.

Nueva raid: Aberrus, el Crisol Penumbroso

Según los relatos de Dragonflight, los Dracthyrs fueron creados en un laboratorio secreto. Este lugar está ubicado en las profundidades de las nuevas cavernas. Nosotros, junto a un grupo de jugadores, deberemos embarcarnos en las entrañas de Zaralek para enfrentar al dracomandante Sarkareth y sabotear sus oscuros planes. Además de este jefe final, en el medio de Aberrus los campeones de Azeroth tendremos que luchar intermitentemente contra otros dragones malignos, hidras y más enemigos próximamente revelados. Como ha sucedido en la primera temporada, las tres dificultades de esta raid (normal, heroica y mítica) se habilitan al mismo tiempo.

Rotación de actividades multiplayer

Hay cuatro calabozos que entran en rotación para este parche: Hondonada Frondacuero, Salas de Infusión, Uldaman: Legado de Tyr y Neltharus. Asimismo, para mantener vivas otras míticas, se habilitan más mazmorras de expansiones anteriores como Puerto Libre (Battle for Azeroth), Bardoma (Battle for Azeroth), Guarida de Neltharion (Legion) y Cumbre del Vórtice (Cataclysm).

Misiones y tareas de mundo

Las líneas de quest se expanden, no sólo para la Caverna Zaralek, sino también para las Islas Dragón, lugar donde casi todo sucede a lo largo de Dragonflight. Por otra parte, se actualiza la dracoequitación, es decir que habrá una mayor oferta de glifos, habilidades, carreras y hasta modelos de dracos. Por último, se suma un nuevo modelo de invasión llamado “Ataques de Fyrakk” que sigue el esquema de los primalistas actuales.

Cambios en el sistema

El parche 10.1 no viene únicamente a agregar contenido, sino que también tiene la función de optimizar cuestiones que la comunidad reclamaba públicamente. Entre ellas se destacan el balance de clases, algunas leves modificaciones de la interfaz, actualizaciones de armaduras de reliquia y ciertos aspectos de la configuración de hermandades.

World of Warcraft: Dragonflight es un gran comienzo para gamers que jamás tuvieron la oportunidad de jugar en este mundo fantástico-medieval. Este producto fusiona con elegancia los mejores elementos clásicos y los más recientes. Si bien no es un juego perfecto y cuenta con la desventaja de no ser free-to-play, si contás con la posibilidad de pagar una suscripción, el dinero invertido se devuelve en mucho tiempo de diversión y un notable servicio constante por parte de la desarrolladora que parece haber encontrado el rumbo más correcto desde el año pasado.

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