Asesinaron a plena luz del día a empresaria hispana en San Bernardino: acusan a cinco hombres por sicariato

Un asesinato en pleno día, captado por cámaras de seguridad, ha revelado un complejo caso de homicidio por encargo en San Bernardino, California. La víctima, Yesenia Torres, una empresaria de 44 años, fue asesinada el pasado 10 de enero en el estacionamiento de un restaurante en lo que, en un principio, parecía un intento de robo. Sin embargo, tras las investigaciones, las autoridades concluyeron que se trató de un ataque planificado, presuntamente orquestado por su esposo, Sergio Reveles, con quien disputaba bienes valorados en millones de dólares.

Según informaron CBS News, KABC y NBC Los Ángeles, el crimen se produjo mientras Torres salía del restaurante Burger Point, ubicado en la cuadra 400 de West Mill Street. Cuando se dirigía a su vehículo, un hombre armado la interceptó, fingiendo robarle el bolso. Acto seguido, le disparó al menos nueve veces mientras ella intentaba huir. Un transeúnte que trató de intervenir también fue atacado, aunque logró sobrevivir. Cámaras de seguridad captaron el momento, permitiendo a las autoridades reconstruir los hechos y vincular a varios sospechosos con el asesinato.

El ataque ocurrió en una zona comercial con alta circulación de personas y vehículos, lo que ha generado preocupación entre los residentes y empresarios locales. Algunos testigos, citados por NBC Los Ángeles, relataron que el sonido de los disparos provocó el pánico entre quienes se encontraban en el área, con varios clientes y empleados refugiándose dentro de los negocios cercanos. “Fue un caos total, todos corrían para resguardarse”, declaró un comerciante de la zona a KABC. Las autoridades han señalado que el crimen, por su nivel de planificación, demuestra la intención de los atacantes de no dejar cabos sueltos, aunque finalmente fueron identificados gracias a las grabaciones de seguridad.

Las investigaciones revelaron que el asesinato no fue un acto espontáneo, sino el resultado de un plan cuidadosamente orquestado. De acuerdo con NBC Los Ángeles, el presunto autor material del crimen, Gerardo Llamas, de 31 años, escapó del lugar en un vehículo conducido por Arnoldo Ruelas, de 54 años. Horas más tarde, el automóvil fue hallado abandonado en el estacionamiento de un Walmart, lo que llamó la atención de los investigadores.

Las grabaciones de seguridad mostraron a los sospechosos cambiándose de ropa antes de abordar un segundo vehículo, conducido por Reynaldo Ruelas, de 37 años, hermano de Arnoldo. Esta conexión familiar fue clave en la investigación, pues Reynaldo trabajaba en una empresa de pallets ubicada en una propiedad compartida por Torres y Reveles. Según KABC, esta empresa, administrada por Juan Pérez, de 42 años, también está implicada en la conspiración.

Las tensiones entre Torres y Reveles por la división de bienes, que incluían propiedades y negocios, fueron señaladas como el principal motivo detrás del crimen. Las autoridades indicaron que el asesinato fue planeado durante más de un año y que existió un pago para los sicarios, aunque no se ha revelado el monto exacto.

El 16 de enero, tras la ejecución de órdenes de registro en Bakersfield y Los Ángeles, la policía arrestó a Llamas, Arnoldo y Reynaldo Ruelas. Durante estas operaciones, se incautaron grandes sumas de dinero en efectivo y varias armas de fuego, lo que reforzó la hipótesis de que el crimen tenía un móvil financiero.

El 6 de febrero, los agentes detuvieron a Reveles y Pérez. En el momento del arresto, confiscaron más de 286.000 dólares en efectivo, además de otras pruebas que vinculan a ambos hombres con la planificación del asesinato. Según NBC Los Ángeles, la evidencia recuperada demostró que la conspiración había estado en marcha durante más de un año.

El jefe de policía de San Bernardino, Darren Goodman, declaró que el caso había generado gran conmoción en la comunidad. “Estos criminales planearon y ejecutaron un asesinato por encargo derivado de un divorcio contencioso”, afirmó Goodman, según KABC. Además, describió a Torres como una figura activa y respetada en la ciudad, lo que ha aumentado el impacto del caso en la población local.

Los cinco acusados enfrentan cargos de asesinato con circunstancias especiales, entre ellas premeditación, beneficio financiero y ejecución del crimen durante un robo, de acuerdo con CBS News. Todos se declararon inocentes y permanecen detenidos sin derecho a fianza.

Su próxima comparecencia ante el tribunal está programada para el 14 de marzo, cuando se espera que la fiscalía presente más pruebas sobre la supuesta conspiración. La oficina del fiscal de distrito del condado de San Bernardino ha señalado que el caso sigue en desarrollo y que aún podrían presentarse más cargos dependiendo de los avances en la investigación.

Aunque se han realizado múltiples arrestos, las autoridades continúan analizando pruebas y buscando posibles cómplices adicionales. Según NBC Los Ángeles, los detectives han solicitado la colaboración del público para obtener más información que pueda esclarecer los detalles del asesinato.

La familia de Torres ha optado por no hacer declaraciones públicas, según los reportes de los medios. Su silencio refleja el dolor por la pérdida y su deseo de que se haga justicia. El caso ha dejado en evidencia las devastadoras consecuencias de los conflictos personales llevados al extremo y ha generado preocupación sobre la violencia derivada de disputas legales y financieras.