Un hombre en California perdió a dos de sus gatos luego de que consumieran leche cruda contaminada con gripe aviar

Las autoridades reportan impactos devastadores del virus H5N1 en el estado de California, donde se concentran el 80% de los casos en rebaños e incidencias en hogares

Guardar
Joseph Journell perdió a dos
Joseph Journell perdió a dos de sus gatos tras darles leche cruda contaminada con el virus H5N1. (Joseph Journell/AP)

Un brote de gripe aviar en productos lácteos crudos ha dejado consecuencias devastadoras para un hombre en San Bernardino, California, quien perdió a dos de sus gatos y enfrentó la hospitalización de un tercero. Según informo ABC News, los animales consumieron leche no pasteurizada de la marca Raw Farm, que había sido retirada del mercado debido a la presencia del virus H5N1.

Joseph Journell, de 56 años, relató que sus gatos, Alexander, un tabby de 14 años, y Tuxsie, un gato de pelaje blanco y negro de 4 años, murieron a finales de noviembre tras ingerir la leche contaminada. Un tercer gato, Big Boy, también de 4 años, fue hospitalizado durante una semana y diagnosticado con el virus H5N1, según confirmaron laboratorios del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos y la Universidad de Cornell. Aunque Big Boy sobrevivió, regresó a casa con ceguera y sin movilidad en sus patas traseras, aunque su dueño asegura que está mostrando señales de recuperación.

Journell explicó que había estado consumiendo leche cruda de Raw Farm durante meses, convencido de que ofrecía beneficios para la salud, como una mejor inmunidad y propiedades curativas. Con la intención de mejorar la salud de Alexander, quien había estado perdiendo peso, decidió compartir el producto con sus gatos. Sin embargo, lo que comenzó como un intento por prolongar la vida de su mascota terminó en tragedia. “Es horrible darte cuenta de que tú mismo les diste la leche que los mató”, expresó Journell a The Associated Press.

Big Boy, el tercer gato
Big Boy, el tercer gato afectado, sobrevivió pero sufrió ceguera y pérdida de movilidad tras la hospitalización. (Joseph Journell/AP)

El impacto del brote en California

El caso de Journell no es un hecho aislado. Según informaron las autoridades de salud, al menos una docena de gatos en California han muerto desde diciembre tras consumir leche cruda o alimentos para mascotas no pasteurizados contaminados con gripe aviar. Este brote se enmarca en una crisis más amplia que ha afectado a más de 900 rebaños lecheros en 16 estados de Estados Unidos, siendo California el más afectado, con el 80 % de los casos registrados.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han emitido reiteradas advertencias sobre los peligros de consumir leche cruda, tanto para humanos como para animales. “Los gatos no deben consumir productos de granjas afectadas si estos no han sido cocinados o pasteurizados adecuadamente para eliminar el virus”, señaló la FDA en un comunicado reciente.

El experto en influenza Richard Webby, del Hospital de Investigación Infantil St. Jude, explicó que la supervivencia del virus en la leche puede variar significativamente entre diferentes lotes, lo que complica aún más la situación. Además, investigaciones previas han confirmado que los gatos que consumen leche cruda de vacas infectadas pueden desarrollar enfermedades neurológicas graves y, en muchos casos, morir.

El brote de gripe aviar
El brote de gripe aviar en California ha causado la muerte de una docena de gatos desde diciembre. (REUTERS/Dado Ruvic)

Una batalla legal y el costo emocional

Journell, quien gastó más de 12.000 dólares en el tratamiento de sus gatos, ha exigido una compensación al propietario de Raw Farm, Mark McAfee, a través de su abogada, Ilana Korchia, especializada en seguridad alimentaria. Sin embargo, McAfee ha cuestionado que el virus pudiera haber afectado a los animales días después de que la leche fuera embotellada y distribuida, basándose en investigaciones preliminares.

A pesar de haber superado físicamente una enfermedad que él mismo sospecha estuvo relacionada con la gripe aviar, Journell asegura que el impacto emocional de perder a sus mascotas sigue siendo devastador. “Todavía estoy lidiando con la angustia mental de haberlos perdido”, confesó. Aunque sigue creyendo en los posibles beneficios de la leche cruda, ha decidido no consumirla en el futuro cercano. “Ni ahora, ni en un futuro previsible”, afirmó a la AP.

El caso de Journell reaviva el debate sobre los riesgos asociados al consumo de leche no pasteurizada. Mientras algunos defensores de estos productos argumentan que ofrecen beneficios para la salud, las autoridades de salud pública insisten en que los peligros superan cualquier posible ventaja. La pasteurización, un proceso que elimina bacterias y virus dañinos, sigue siendo la recomendación principal para garantizar la seguridad de los productos lácteos.

Guardar