Mujer de Florida es arrestada luego de confundir el número de su ‘dealer’ con el de la policía y pedirles drogas

Octavia Wells, del condado de Bay, se encuentra detenida luego de intentar obtener una dosis de fentanilo a través de mensaje de texto; no obstante, en realidad se estaba comunicando con un agente antidrogas

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Una mujer de Florida fue
Una mujer de Florida fue arrestada luego de confundir el número de la policía con el de su dealer y pedirles dosis de fentanilo. (Bay County Sheriff's Office)

Las cosas tomaron un giro insólito para Octavia Wells, una mujer de 41 años residente de Florida, cuando intentó comprar fentanilo a través de un mensaje de texto. Sin embargo, en lugar de llegar a su presunto distribuidor, el mensaje aterrizó en el teléfono de un investigador de narcóticos del Departamento del Sheriff del Condado de Bay. El error desató un operativo encubierto que culminó con su arresto en una gasolinera local el pasado 31 de diciembre de 2024, según confirmó el propio departamento en un comunicado en sus redes sociales.

Wells, quien según las autoridades buscaba adquirir el opioide sintético antes de abandonar la ciudad, no verificó que el número al que enviaba el mensaje pertenecía a su supuesto proveedor. En su lugar, contactó por error a un investigador de narcóticos del Departamento del Sheriff del Condado de Bay. “La mujer identificada como Octavia inició la conversación a través de un mensaje de texto, sin saber que estaba contactando a las fuerzas del orden”, detalló el departamento en su publicación del 6 de enero de 2025.

Aprovechando la oportunidad, el investigador se hizo pasar por un vendedor de drogas, organizando una reunión para concretar la “transacción”. El lugar elegido fue una gasolinera local, donde, en lugar de un distribuidor, Wells fue recibida por un equipo de agentes del área de Investigaciones Especiales, informaron las autoridades en el comunicado.

Los cargos que enfrenta Octavia Wells

El encuentro en la gasolinera resultó en la detención inmediata de Wells. Según las autoridades, enfrenta varios cargos, entre ellos, uso ilegal de un dispositivo de comunicación de dos vías, posesión de parafernalia de drogas y conducir con conocimiento de que su licencia estaba suspendida o revocada. Este último cargo resalta un patrón de conductas que ponen en riesgo la seguridad pública, señaló el Departamento del Sheriff.

El arresto se efectuó en
El arresto se efectuó en una gasolinera luego de que el agente antidrogas se hiciera pasar por un traficante. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La insólita naturaleza del caso no tardó en captar la atención en redes sociales. Usuarios de Facebook reaccionaron con incredulidad, algunos calificando a Wells como “la criminal más tonta de América”. “¿Qué estaba haciendo con el número del investigador?”, se preguntó un usuario, mientras otro comentó: “Probablemente salvó una vida con su error”.

A pesar del tono humorístico de muchos comentarios, algunos subrayaron las implicaciones más graves. La posibilidad de que Wells haya evitado, accidentalmente, la distribución de una droga tan peligrosa como el fentanilo provocó reflexiones más profundas sobre la crisis de los opioides en Estados Unidos.

La amenaza del fentanilo

El fentanilo, desarrollado originalmente para tratar el dolor intenso en pacientes postquirúrgicos o con enfermedades crónicas, se ha convertido en un componente clave de la crisis de sobredosis en Estados Unidos. Según la DEA, el opioide sintético, 100 veces más potente que la morfina, es fabricado ilícitamente en laboratorios clandestinos y se mezcla con otras sustancias para aumentar su potencia. Estas combinaciones, vendidas como polvos, píldoras o aerosoles nasales, suelen contener dosis letales debido a la falta de controles de calidad.

La CDC señala que los opioides sintéticos son la principal causa de muertes por sobredosis en el país. “Sin pruebas de laboratorio, no hay manera de saber la cantidad de fentanilo en una píldora o qué tan contaminada está una droga”, advierte la DEA en su sitio web. Esto eleva el riesgo para consumidores que ignoran el peligro real de estas sustancias adulteradas.

El Departamento del Sheriff del Condado de Bay concluyó su comunicado con un mensaje claro: “Tengan cuidado a quién le escriben”. Una lección que, sin duda, resonará con Octavia Wells y otros que, como ella, intentan jugar con fuego en un contexto de creciente vigilancia policial frente a la crisis de drogas en el país.

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