Nueva York regula la recolección de basura: multas de hasta USD 200 por no usar contenedores

A partir del 2 de enero de 2025, la ciudad de Nueva York puso en marcha nuevas regulaciones que afectan a los edificios residenciales con menos de 10 unidades. La normativa, impulsada por el alcalde Eric Adams, establece el uso obligatorio de contenedores de basura con tapas ajustadas, limitando la acumulación de residuos en las aceras. El Departamento de Sanidad de Nueva York ha explicado que esta medida responde a la necesidad de reducir la proliferación de ratas y mejorar la limpieza en la ciudad.

Esta regulación obliga a los propietarios de viviendas a adquirir contenedores que no excedan los 55 galones de capacidad y que cuenten con tapas seguras para evitar la exposición de basura. El incumplimiento de estas reglas conlleva sanciones económicas, con multas que van desde USD 50 en la primera infracción hasta USD 200 por reincidencias. La medida tiene como objetivo erradicar una práctica común en Nueva York: dejar bolsas de basura en la vía pública, lo que contribuye a la proliferación de plagas y afecta la salubridad del entorno urbano.

Además, la administración de Adams ha anunciado que, a partir de junio de 2026, será obligatorio el uso de contenedores de basura oficiales fabricados por la empresa Otto. Estos contenedores están diseñados con tapas seguras, ruedas y barras metálicas para facilitar la recolección mecanizada. Los precios varían entre USD 45.88 y USD 53.01, dependiendo de la capacidad, y estarán disponibles para la compra a través de los canales oficiales de la ciudad.

En junio de 2026, el uso de contenedores oficiales de la ciudad, fabricados por Otto, será obligatorio para todos los edificios de hasta 9 unidades. Estos contenedores incluyen tapas con seguro, ruedas, barras metálicas para recolección mecanizada y una garantía de 10 años. Según el sitio web del DSNY, el precio de los contenedores varía: el de 35 galones tiene un costo de USD 45.88 y el de 45 galones cuesta USD 53.01.

Hasta la fecha límite de 2026, los residentes podrán utilizar cualquier contenedor que cumpla con las especificaciones de tamaño y seguridad. Sin embargo, desde enero de 2025, las bolsas de basura no podrán dejarse directamente en la acera, una práctica común en la ciudad.

En paralelo, el Departamento de Sanidad implementará un programa piloto en junio de 2025 para edificios con más de 30 unidades en el Distrito Comunitario 9 de Manhattan, que abarca gran parte de West Harlem. Este programa contempla el uso de contenedores estacionarios en las calles, diseñados para ser recolectados por camiones de basura adaptados con sistemas de carga lateral mecanizada.

Los edificios con entre 10 y 30 unidades podrán solicitar la participación en el programa piloto o deberán utilizar contenedores rígidos de hasta 55 galones con tapas ajustadas. El DSNY evaluará las solicitudes y determinará la elegibilidad de cada edificio. Aquellos que no presenten solicitudes o que sean rechazados deberán utilizar contenedores individuales.

El DSNY permitirá excepciones para edificios que ya reciben recolección de basura fuera de la calle o en circunstancias determinadas por el departamento. Los edificios con más de 31 unidades que no cumplan con los requisitos del programa piloto deberán seguir utilizando contenedores estacionarios autorizados por el DSNY.

Staten Island se verá mínimamente afectado por estas regulaciones, ya que cuenta con menos de 200 edificios que superan las 30 unidades y alrededor de 250 edificios con entre 10 y 30 unidades. En total, estos edificios representan menos del 1% de las estructuras residenciales de gran tamaño en los cinco distritos de la ciudad.

Los propietarios de edificios serán responsables de la limpieza y el mantenimiento de los contenedores y del área circundante. Durante el programa piloto en Harlem, el DSNY se encargará de la compra de los contenedores, aunque no se ha aclarado quién asumirá los costos en futuras fases del programa.

El éxito del programa piloto en West Harlem determinará si se expande a otras partes de la ciudad y si se aplican medidas adicionales a edificios de diferentes tamaños.

Además de estas medidas, el DSNY ha destacado que seguirá evaluando otras formas de mejorar la recolección de basura en zonas densamente pobladas. Se espera que el programa evolucione en función de los resultados y de la respuesta de los residentes a las nuevas normativas, con el fin de garantizar un entorno más limpio y ordenado en toda la ciudad de Nueva York.