El sur de California enfrenta una crisis de proporciones alarmantes debido a tres incendios forestales que han arrasado miles de hectáreas y obligado a la evacuación de miles de personas. Según reportó Fox News, los incendios, alimentados por los intensos vientos de Santa Ana, han generado una situación de emergencia en varias comunidades de Los Ángeles y sus alrededores.
Las llamas, que avanzan a una velocidad devastadora, han destruido hogares, negocios y sitios históricos, mientras los bomberos luchan por contener el desastre.
El destructivo Eaton Fire
El Eaton Fire, localizado en el área de Altadena, ha sido uno de los más destructivos, alcanzando las 1.000 hectáreas en las primeras horas del miércoles. Según informó ABC News, el fuego devastó decenas de viviendas en la comunidad de Hastings Ranch, donde las imágenes muestran casas completamente consumidas por las llamas, dejando solo chimeneas en pie.
Las autoridades emitieron órdenes de evacuación obligatoria para varias zonas, incluyendo áreas al norte de Sierra Madre y al este de Allen Avenue, mientras que otras comunidades cercanas permanecen bajo advertencia de evacuación. Centros de refugio han sido habilitados en lugares como el Pasadena Convention Center, donde también se ofrece asistencia para mascotas a través de la Humane Society.
El rápido crecimiento de Hurst Fire
Por otro lado, el Hurst Fire, también conocido como el incendio de Sylmar, comenzó el martes por la noche en el área de Yarnell, al norte de Foothill Boulevard, y se ha extendido rápidamente, alcanzando las 500 hectáreas sin ningún nivel de contención hasta el momento.
Según detalló KSBW, las órdenes de evacuación afectan a las áreas al norte de la autopista 210, desde Roxford Street hasta la intersección de las autopistas 5 y 14. Además, el tráfico en estas vías ha sido severamente afectado, con cierres en la autopista 14 y en el conector hacia la autopista 5 en dirección sur.
Las autoridades habilitaron refugios en centros recreativos como el Ritchie Valens Recreation Center y el Northridge Park, mientras los bomberos enfrentan dificultades debido a los fuertes vientos que alcanzan velocidades de hasta 129 kilómetros por hora.
El agresivo Palisades Fire
El tercer incendio, conocido como el Palisades Fire, causó estragos en la costa oeste de Los Ángeles, extendiéndose desde Pacific Palisades hasta Malibú. Según reportó Fox News, este incendio ha consumido más de 1.182 hectáreas y ha cruzado la Pacific Coast Highway, afectando comunidades como Sunset Mesa y Las Flores Canyon.
Entre las pérdidas más significativas se encuentran instituciones históricas y negocios emblemáticos, como el Getty Villa Art Museum, el restaurante Reel Inn y la bodega Rosenthal Winery.
Los propietarios del Reel Inn expresaron su pesar en redes sociales, agradeciendo los 36 años de apoyo de la comunidad y manifestando su esperanza de reconstruir en el futuro.
Los vientos de Santa Ana, característicos de esta temporada, han sido un factor determinante en la propagación de los incendios. Según el Servicio Meteorológico Nacional, las ráfagas han alcanzado velocidades de hasta 161 kilómetros por hora en áreas montañosas y de 96 kilómetros por hora en zonas urbanas.
Estas condiciones dificultaron el trabajo de los bomberos, especialmente en el uso de aeronaves para combatir las llamas.
Las autoridades californianas reaccionan
El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció que más de 1.400 bomberos y cientos de recursos adicionales han sido desplegados para enfrentar la emergencia. “Todos los recursos están siendo utilizados para proteger vidas”, afirmó el funcionario en un comunicado publicado en la red social X. Además, destacó que equipos de ayuda mutua de todo el estado están siendo enviados al sur de California para reforzar los esfuerzos de contención.
Mientras tanto, el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) intensificó su presencia en las áreas afectadas, implementando patrullas de alta visibilidad para prevenir posibles saqueos o actividades delictivas. “Nos mantenemos vigilantes durante los incendios en toda la ciudad de Los Ángeles”, declaró el LAPD en un comunicado, asegurando que hasta el momento no se han reportado incidentes de este tipo.