El pasado 1 de enero, Nueva Orleans fue escenario de un ataque que dejó al menos 14 muertos y numerosos heridos, cuando un hombre identificado como Shamsud-Din Jabbar, de 42 años, condujo un camión alquilado contra una multitud en la icónica Bourbon Street.
Según informó CBS News, el atacante, un ciudadano estadounidense nacido en Texas y veterano del Ejército, fue abatido en un enfrentamiento con la policía tras el incidente. Las autoridades han calificado el ataque como un acto de terrorismo, y el FBI lidera la investigación para esclarecer los motivos detrás de esta tragedia.
Según reportó Fox News, Jabbar no solo utilizó el camión como arma, sino que también estaba armado con un rifle estilo AR-15 y una pistola. Además, había colocado dos dispositivos explosivos improvisados (IED), que fueron desactivados por las fuerzas de seguridad antes de que pudieran causar más daño.
En el vehículo, llevaba una bandera del grupo terrorista ISIS en el enganche del remolque, y en las horas previas al ataque, publicó videos en redes sociales expresando su apoyo a esta organización. En dichos videos, el atacante afirmó que inicialmente había considerado atacar a su propia familia y amigos, pero desistió porque temía que los titulares no destacaran lo que él describió como “la guerra entre creyentes y no creyentes”, según explicó Christopher Raia, subdirector asistente de la división de contrainteligencia del FBI.
El hermano del atacante se pronuncia
Abdur-Rahim Jabbar, medio hermano del acusado, expresó su sorpresa y consternación ante los hechos. Aunque ambos hermanos no fueron cercanos durante su infancia debido a la diferencia de edad, se reconectaron en 2023 mientras cuidaban a su padre, quien había sufrido un derrame cerebral.
Durante ese tiempo, Abdur-Rahim notó que su hermano se había vuelto más devoto en su práctica religiosa, adoptando un estilo de vida más conservador, dejando atrás hábitos como el consumo de alcohol y drogas, y eliminando algunos tatuajes. Sin embargo, aseguró que no percibió señales de radicalización.
“Esto tomó a todos completamente por sorpresa”, declaró Abdur-Rahim a CBS News, añadiendo que su hermano había sido un musulmán practicante desde joven, aunque en algún momento se había alejado de la religión antes de volver a ella tras su último divorcio. Según explicó, Shamsud-Din parecía estar buscando orientación en su vida, especialmente después de sus fracasos matrimoniales y problemas financieros. Incluso su decisión de unirse al Ejército, años atrás, fue vista como un intento de encontrar estabilidad y propósito.
A pesar de los cambios en su comportamiento, el hermano del atacante enfatizó que no había indicios de que estuviera planeando un ataque.
“Esto no es un reflejo directo de mi hermano ni de la comunidad musulmana”, afirmó, al tiempo que expresó sus condolencias a las familias de las víctimas.
Un pasado marcado por conflictos personales y financieros
El historial de Jabbar revela una vida llena de dificultades personales y económicas. Según documentos judiciales citados, el atacante había enfrentado tres divorcios, el último de ellos en 2022. Su primera esposa obtuvo la custodia de sus dos hijos tras su separación en 2012. Posteriormente, Jabbar contrajo matrimonio en 2013 y se divorció en 2016, para luego casarse nuevamente en 2017, relación que también terminó en una ruptura. De este último matrimonio, tuvo un hijo.
Durante el proceso de su último divorcio, su entonces esposa lo acusó de mala gestión financiera, incluyendo el uso de dinero para mantener relaciones con otras mujeres. Además, obtuvo una orden de restricción temporal en su contra.
Los registros judiciales también muestran que el atacante enfrentaba serias dificultades económicas, con gastos mensuales que superaban sus ingresos, a pesar de ganar aproximadamente 125.000 dólares al año trabajando para la consultora Deloitte, donde había sido contratado en 2021.
La investigación en curso y las incógnitas sobre el ataque
El FBI continúa investigando los motivos detrás del ataque y por qué Jabbar eligió Bourbon Street como objetivo. Según CBS News, los agentes han interrogado a Abdur-Rahim y a otros familiares para obtener más información sobre el estado mental y el comportamiento reciente del atacante.
Aunque los videos publicados por Jabbar antes del ataque sugieren una motivación ideológica vinculada al extremismo islámico, las autoridades aún buscan esclarecer si actuó solo o si recibió apoyo de alguna organización.
El ataque ha dejado una profunda huella en la comunidad de Nueva Orleans, conocida por su vibrante vida nocturna y su espíritu festivo. Las familias de las víctimas enfrentan un dolor incalculable, mientras que los residentes intentan procesar el impacto de un acto de violencia tan devastador en el corazón de su ciudad.