El gobierno de Estados Unidos emitió este viernes nuevas sanciones de ciberseguridad contra Integrity Technology Group, una empresa china dedicada a la programación informática, por su presunto papel en múltiples incidentes de ataques de hackers dirigidos contra infraestructuras críticas estadounidenses desde 2021, según se desprende de una publicación en el sitio web del Departamento del Tesoro de EEUU.
La empresa, que tiene su sede en Beijing, ha sido acusada antes por funcionarios occidentales de estar detrás de un importante grupo de piratas informáticos chinos apodado “Flax Typhoon”.
En su intervención en una conferencia sobre ciberseguridad el año pasado, el director del FBI, Christopher Wray, dijo que Integrity Technology se hacía pasar por una empresa de TI, pero también “recopilaba información de inteligencia y realizaba tareas de reconocimiento para las agencias de seguridad del Gobierno chino”. En aquel momento, funcionarios chinos acusaron a Estados Unidos y sus aliados de haber “llegado a una conclusión injustificada y haber hecho acusaciones infundadas contra China”.
Las sanciones de este viernes llegan unos días después de que el gobierno del presidente Joe Biden informara que hackers chinos accedieron remotamente a varias estaciones de trabajo y documentos no clasificados del Departamento del Tesoro de Estados Unidos en un importante incidente de ciberseguridad.
El Departamento del Tesoro dijo que se enteró del problema el 8 de diciembre, cuando un proveedor de servicios de software de terceros, BeyondTrust, señaló que los hackers habían robado una clave “utilizada por el proveedor para asegurar un servicio basado en la nube utilizado para proporcionar soporte técnico a distancia” a los trabajadores.
Sin embargo, estas sanciones no parecen estar relacionadas con el pirateo del Tesoro del 8 de diciembre.
El portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Matthew Miller, dijo que Integrity Tech era “un gran contratista del gobierno de la República Popular China con vínculos con el Ministerio de Seguridad del Estado”.
Miller dijo que los hackers vinculados a Integrity Tech, “conocidos en el sector privado como ‘Flax Typhoon’, trabajaban bajo la dirección del gobierno chino, apuntando a infraestructuras críticas en los Estados Unidos y en el extranjero”.
Por su parte, el subsecretario interino del Tesoro, Bradley Smith, dijo que Estados Unidos desbaratará las ciberamenazas “mientras se sigue trabajando en colaboración para reforzar las ciberdefensas del sector público y privado”. Y añadió que “el Departamento del Tesoro no dudará en responsabilizar de sus actos a los ciberdelincuentes malintencionados y a quienes los faciliten”.
Las sanciones bloquean el acceso a propiedades y cuentas bancarias estadounidenses e impiden a las personas y empresas objeto de las sanciones hacer negocios con estadounidenses.
Las autoridades estadounidenses siguen lidiando con las consecuencias de una campaña masiva de ciberespionaje chino conocida como Salt Typhoon, que permitió a funcionarios de Beijing acceder a mensajes de texto y conversaciones telefónicas privadas de un número indeterminado de estadounidenses.
(Con información de AFP, AP y Reuters)
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