Un hombre identificado como Jami Raiziah Griffin fue arrestado el 27 de diciembre en Sanford, Carolina del Norte, acusado de intentar asesinar a una joven tras rociarla con gasolina y prenderle fuego. El incidente ocurrió el pasado 16 de diciembre y dejó a la víctima, Ashanti Downey, de 20 años, con quemaduras de tercer grado.
Según informaron WTVD-TV, WNCN-TV y WRAL-TV, Griffin, de 23 años, enfrenta cargos de intento de asesinato en primer grado, asalto con un arma mortal con intención de matar y asalto menor. Downey fue hallada gravemente herida cerca de Barbecue Church Road y trasladada de inmediato a emergencias, donde permanece en estado crítico, pero estable.
El sheriff del condado de Harnett, Wayne Coats, describió el ataque como una “pesadilla” para la familia de la víctima. En declaraciones a WTVD-TV, Coats indicó que el motivo inicial parece estar relacionado con un conflicto doméstico, aunque no se descarta la participación de otros individuos, mencionando incluso la posibilidad de una “iniciación de pandillas”.
Convivencia previa y posible trasfondo doméstico
WRAL-TV informó que Griffin y Downey compartían residencia en el momento del ataque, lo que refuerza la hipótesis de que el incidente podría tener un trasfondo de violencia doméstica. Los investigadores aún no han confirmado si hubo antecedentes de conflictos previos entre ambos, pero continúan explorando todas las posibles motivaciones detrás de este acto violento.
El sheriff Coats señaló que las autoridades están desconcertadas por lo ocurrido y enfatizó la necesidad de proteger a las víctimas de violencia de género. Griffin fue ingresado en el Centro de Detención del Condado de Harnett, donde permanece bajo custodia a la espera de su primera comparecencia judicial, programada para el lunes 30 de diciembre.
Testimonio de la familia y apoyo comunitario
La madre de la víctima, Donecia Davis, expresó su angustia ante los medios. En declaraciones a WRAL-TV, Davis dijo: “¿Cómo pudieron hacerle esto a mi bebé? No tenían por qué hacerle esto”. Davis ha iniciado una campaña de recaudación de fondos a través de GoFundMe para cubrir los gastos médicos de su hija.
Según la descripción publicada en la plataforma, el ataque ha tenido un impacto devastador en la vida de Downey, y Davis asegura que ha estado junto a ella cada día durante su recuperación. “Ningún padre debería ver a su hijo en la condición en la que está mi hija”, comentó.
Hasta el 28 de diciembre, más de dos mil personas habían contribuido a la campaña, que ha superado la meta inicial de 75 mil dólares, alcanzando una suma superior a los 88 mil dólares, según informó People.
Impacto en la comunidad y seguimiento del caso
El caso ha conmocionado a la comunidad local y ha recibido amplia cobertura en los medios. Las autoridades continúan recopilando pruebas y testimonios para esclarecer las circunstancias exactas del ataque. El sheriff Coats reiteró la importancia de visibilizar la violencia doméstica y brindar apoyo a las víctimas, destacando que este tipo de crímenes no deben ser tolerados.
El ataque ocurrió pocas semanas antes del vigésimo primer cumpleaños de Downey, que se celebrará el 1 de enero. Según People, se espera que las próximas audiencias judiciales revelen más detalles sobre las acusaciones contra Griffin y las posibles sentencias que podría enfrentar.
Mientras la investigación avanza, la familia de Downey sigue concentrada en su recuperación. Davis agradeció el apoyo recibido de la comunidad y subrayó la importancia de seguir luchando por la justicia para su hija.