Repartidor de Walmart es acusado de realizar un acto obsceno frente a una clienta después de una entrega

Una mujer de Carolina del Sur presentó una demanda contra la compañía Walmart Inc. tras presenciar un acto de indecencia cometido presuntamente por uno de sus conductores de entregas. Según informó WBTW, el hecho ocurrió el pasado 8 de julio en el área de Myrtle Beach, cuando Alvin B. Ortiz, trabajador de la compañía, fue sorprendido mientras se masturbaba dentro de su vehículo frente al domicilio de la demandante, identificada legalmente como “Jane Doe”.

De acuerdo con documentos judiciales, Ortiz, de 39 años, realizó una entrega de comestibles en la residencia de la mujer a las 9:10 de la mañana. Tras completar la entrega, permaneció estacionado frente a la casa durante aproximadamente 10 a 15 minutos, lo que llamó la atención de la demandante. Al salir para verificar la situación, la mujer afirma haberlo encontrado con los pantalones abajo. “La mujer dijo que corrió de vuelta a su casa y agarró a su hijo pequeño para esconderse antes de llamar a un vecino que sabía que estaba en casa”, detalló WBTW citando la demanda.

El vecino acudió de inmediato y confrontó a Ortiz, quien intentó cubrirse y comenzó a discutir antes de abandonar el lugar. WBTW señaló que mientras se retiraba, Ortiz gritó por la ventana que regresaría para “arruinarles la vida”. La denunciante alertó a la policía, lo que llevó a la notificación del incidente a Walmart. Al día siguiente, Ortiz fue arrestado por exposición indecente y liberado bajo fianza. El proceso judicial contra Ortiz sigue en curso.

La demanda, presentada el 19 de diciembre en la Corte de Pleitos Comunes del Condado de Horry, también nombra como acusados a Spark Delivery y Wal-Mart Stores East, alegando que la empresa no tomó las precauciones necesarias al contratar a Ortiz. Según los documentos, Walmart no realizó una verificación de antecedentes adecuada, lo que permitió que Ortiz, presuntamente, estuviera en una posición que le brindaba acceso directo a los hogares de los clientes.

“El documento judicial acusa a Walmart de no implementar medidas adecuadas para verificar la idoneidad de sus empleados”, reportó WBTW, subrayando que la empresa es responsable de las acciones de sus trabajadores mientras desempeñan sus funciones. La demandante sostiene que la falta de controles de seguridad contribuyó directamente al daño sufrido.

En la demanda, Jane Doe alega haber experimentado “dolor mental y emocional, daño psicológico y pérdida del disfrute de la vida, tanto en el pasado como en el futuro”. Los documentos legales detallan que la demandante solicita una compensación económica para cubrir los gastos médicos relacionados con el trauma, así como posibles tratamientos futuros.

En respuesta a las acusaciones, Walmart emitió un comunicado a WBTW indicando que la compañía está revisando la denuncia para determinar los próximos pasos legales. “La seguridad de nuestros empleados y clientes siempre es una prioridad”, expresó la empresa, añadiendo que responderán formalmente ante el tribunal.

El caso ha generado un intenso debate sobre las políticas de contratación y supervisión en empresas de gran magnitud. Analistas y expertos en seguridad laboral advierten que incidentes como este revelan posibles fallos en los procesos de evaluación de antecedentes y monitoreo de empleados que realizan entregas a domicilio.

Ortiz podría enfrentar severas consecuencias legales si es declarado culpable, mientras que Walmart podría ser objeto de sanciones económicas y revisiones a sus protocolos de seguridad. El caso continúa siendo seguido de cerca por la comunidad local y las autoridades, en espera de futuras decisiones judiciales.