En un giro clave para la industria de recolección de basura privada en la ciudad de Nueva York, el próximo 2 de enero comenzará a operar la primera “zona de desechos comerciales” en una sección de Queens central. Esta iniciativa surge tras años de debates y legislación, marcando un intento de abordar los riesgos laborales y reducir los accidentes viales relacionados con camiones de basura privados, según informó Gothamist.
La implementación de esta medida es resultado de una legislación del Concejo Municipal de 2019 que inició la creación de veinte zonas de desechos comerciales. Estas áreas tienen como objetivo reorganizar el transporte de basura en regiones específicas, eliminando la superposición de rutas que actualmente abarcan múltiples distritos. Autoridades de Saneamiento apuntan que esta desorganización ha fomentado condiciones laborales riesgosas y una alta incidencia de accidentes. Entre 2010 y 2019, un informe oficial registró 43 muertes en accidentes relacionados con la industria de desechos comerciales en Nueva York, de acuerdo con en medio.
Además de reducir accidentes y mejorar las condiciones laborales, el programa de zonas de desechos comerciales también busca reducir los problemas ambientales asociados con la industria. Al limitar el número de camiones que operan dentro de cada zona, se espera disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y otros contaminantes generados por los vehículos pesados. Según expertos, esta reorganización podría contribuir significativamente a los objetivos climáticos de la ciudad, promoviendo una gestión más sostenible de los residuos urbanos.
Obligaciones para los negocios y la competencia en la industria
A partir de la fecha de implementación, los negocios ubicados dentro de la nueva zona tendrán exclusivamente tres opciones de empresas certificadas para contratar el servicio de recolección de basura. La elección de un proveedor es obligatoria para los propietarios, ya que, según declaró Joshua Goodman, portavoz del Departamento de Saneamiento, “los negocios que no seleccionen una compañía terminarán pagando la tarifa máxima permitida”. Además, enfatizó la necesidad de que las empresas participen activamente: “Esto significará calles más limpias y seguras, pero los negocios deben registrarse con un nuevo contrato pronto, o arriesgarse a pagar más”, señaló Gothamist .
En el terreno, la nueva estructura está generando actividad frenética. Funcionarios de saneamiento visitan a propietarios de negocios en Ridgewood, área asignada a unos 9 mil establecimientos, para informar sobre los cambios previstos. Mientras tanto, las empresas recolectoras aprobadas han intensificado su competencia en la zona, buscando captar clientes.
Reformas de seguridad en una industria en extremo peligrosa
La industria privada de recolección de basura en Nueva York ha enfrentado serios desafíos en términos de seguridad. Aunque los cambios apuntan a reducir los riesgos, organizaciones como Transform Don’t Trash NYC advierten que varias compañías seleccionadas para operar en las nuevas zonas aún presentan repetidas violaciones de seguridad. Un ejemplo preocupante tuvo lugar en mayo de este año, cuando un conductor de Liberty Ashes, una de las empresas involucradas, atropelló y mató a un hombre de 35 años en Greenwich Village mientras retrocedía un camión. Según la policía, el conductor no fue arrestado.
A pesar de estos incidentes, algunos expertos reconocen que las reformas iniciadas en 2019 están generando mejoras graduales. El consultor de seguridad David Biderman señaló a Gothamist que las empresas recolectoras privadas han adoptado prácticas más responsables, como parte de los requisitos fiscales por las zonas comerciales. “Las zonas de desechos comerciales continuarán los importantes avances en seguridad que los recolectores ya han visto en los últimos años. Reducir los kilómetros recorridos por los vehículos ayudará a disminuir accidentes y emisiones”, dijo Biderman.
Retos en la expansión del modelo de zonas
El Departamento de Saneamiento planea analizar cuidadosamente la implementación en Queens central antes de extender el modelo al resto de las zonas previstas. Aunque no se ha establecido un cronograma definitivo para el despliegue total, las autoridades indicaron que las lecciones aprendidas en esta etapa inicial serán fundamentales para ajustar y perfeccionar el sistema.
El concejal Shaun Abreu, presidente del Comité de Saneamiento del Concejo Municipal, subrayó la importancia de mantener un equilibrio entre rapidez y eficacia. En declaraciones a Gothamist , afirmó: “Vamos a responsabilizar a la administración y asegurarnos de que avancen lo más rápido posible, pero también de una manera que no comprometa el éxito de este programa”.
Este esfuerzo busca, no solo mejorar la seguridad, sino también transformar la imagen de las calles de Nueva York y mitigar el impacto ambiental de la recolección de basura. A medida que el proyecto avanza, genera expectativa entre defensores y críticos, mientras se espera que sirva como un modelo piloto tanto en el ámbito de seguridad vial como en la eficiencia en la gestión de residuos.