El FBI investiga la muerte de un pasajero en crucero durante un viaje entre Los Ángeles y México

El FBI está investigando la muerte de Michael Virgil, un pasajero de 35 años, a bordo del crucero Navigator of the Seas, operado por Royal Caribbean International. La agencia federal se involucró en el caso el lunes, al regreso de la embarcación al puerto de Los Ángeles, tras un itinerario de fin de semana.

Laura Eimiller, portavoz de la oficina en Los Ángeles, confirmó que el organismo está llevando a cabo las investigaciones correspondientes. Aunque no se han proporcionado detalles específicos sobre las circunstancias del fallecimiento, el caso se encuentra bajo un riguroso escrutinio para determinar los hechos y posibles responsabilidades.

La intervención del FBI responde a su jurisdicción sobre crímenes graves ocurridos en aguas internacionales o en embarcaciones bajo bandera estadounidense que llegan a puertos del país. La agencia trabaja en colaboración con la compañía Royal Caribbean y las autoridades locales para reunir pruebas que permitan esclarecer las causas y el contexto de la muerte de Virgil.

El trágico suceso ocurrió durante un viaje del crucero que había partido de Los Ángeles hacia Ensenada, México. Según reportes de testigos, citados por ABC News, Virgil adoptó un comportamiento violento poco después de zarpar. Se encontraba en estado de ebriedad y presuntamente atacó a dos miembros de la tripulación, además de amenazar de muerte a otro pasajero.

Un video grabado por un testigo, identificado como Christopher Mikhail, mostró a Virgil intentando patear la puerta de una habitación donde se refugiaba un miembro de la tripulación. En otro momento, el pasajero fue observado golpeando a un trabajador y pateando a otro. La situación escaló rápidamente, lo que obligó a la seguridad del barco a intervenir. Las imágenes capturan el momento en que el personal de seguridad logra someterlo en el suelo, utilizando toallas para inmovilizarlo.

La secuencia exacta de los eventos que llevaron a su muerte permanece bajo investigación, ya que no está claro si esta ocurrió durante el proceso de contención o posteriormente. La Oficina del Médico Forense del Condado de Los Ángeles todavía no ha divulgado la causa oficial del fallecimiento.

La embarcación, conocida por su oferta de entretenimiento y recorridos cortos, regresó al puerto de Los Ángeles el lunes, donde el FBI intervino para investigar el suceso que culminó con la muerte de Virgil.

Aunque el crucero logró completar su recorrido según lo programado, el incidente resaltó los desafíos de manejar emergencias en entornos cerrados como una embarcación en altamar.

Tanto Royal Caribbean International como las autoridades involucradas emitieron comunicados respecto al incidente ocurrido en el crucero. La compañía expresó sus condolencias por el fallecimiento del pasajero y señaló que están proporcionando apoyo a su familia.

En una declaración oficial enviada por correo electrónico, Royal Caribbean afirmó: “Estamos profundamente apenados por el fallecimiento de uno de nuestros huéspedes. Ofrecimos apoyo a la familia y estamos cooperando plenamente con las autoridades en su investigación”.

El fallecido viajaba a bordo del crucero Navigator of the Seas mientras viajaba con su prometida y su hijo de 7 años. Según declaraciones de su familia, el comportamiento errático observado durante el incidente no era coherente con la personalidad habitual de Virgil. Describieron su conducta en el episodio como un hecho aislado y expresaron su conmoción por el desenlace fatal.

Un familiar cercano comentó a Fox 11 que el hombre “no merecía morir por esto”, subrayando la sorpresa y el dolor que su pérdida ha causado entre sus seres queridos.