Estados Unidos duplicó el número de sus fuerzas en Siria para luchar contra el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) antes del derrocamiento del régimen del dictador Bashar al Assad, según informó el Pentágono este jueves.
Washington había dicho previamente que había 900 soldados en Siria, pero este jueves, el general de división Pat Ryder, secretario de prensa del Pentágono, anunció que había 2.000 militares y que llevaban allí un tiempo.
El Pentágono había sido preguntado repetidamente en los últimos días y semanas sobre la presencia estadounidense en Siria y nunca había revelado el drástico aumento. Ryder dijo que las fuerzas adicionales habían estado en Siria “como mínimo meses... ha estado sucediendo por un tiempo”.
Dijo a los periodistas que el aumento de las fuerzas era temporal y que están allí para aumentar las operaciones estadounidenses contra ISIS. Dijo que las fuerzas convencionales y de operaciones especiales del Ejército de Estados Unidos constituyen el grueso de las tropas adicionales.
Las fuerzas rebeldes derrocaron a Bashar al Assad hace dos semanas. En los días transcurridos desde entonces, tanto Israel como Turquía han lanzado operaciones militares dentro de las fronteras de Siria, incluidos los ataques aéreos de Tel Aviv contra instalaciones de armas en el este que pertenecían al régimen de Assad y la ofensiva de Turquía en el noreste contra las fuerzas kurdas, que se han asociado con Estados Unidos en su lucha contra el Estado Islámico.
Estados Unidos también ha intensificado significativamente los ataques aéreos contra objetivos del ISIS en Siria por temor a que un vacío de poder permita al grupo terrorista reconstituirse.
Hasta el jueves, el Pentágono había insistido en que no había habido ningún cambio en el número de fuerzas estadounidenses en Siria, incluso cuando surgieron preguntas sobre si la nueva inestabilidad allí ha puesto en peligro la misión de Estados Unidos.
El presidente electo Donald Trump intentó retirar las fuerzas de Siria durante su primer mandato, lo que llevó al ex secretario de Defensa Jim Mattis a dimitir en protesta, y mientras se prepara para regresar a la Casa Blanca, Trump ha dicho que no apoya que las fuerzas estadounidenses se involucren más en Siria.
“Contacto directo”
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, dijo el sábado pasado que varios funcionarios estadounidenses han estado en contacto directo con el grupo rebelde sirio que encabezó el derrocamiento de Al Assad.
Blinken es el primer funcionario estadounidense en confirmar públicamente los contactos entre el gobierno del presidente Joe Biden y Hayat Tahrir al-Sham, o HTS, que lideró una coalición de grupos armados de oposición que derrocaron al dictador sirio.
En una conferencia de prensa en Aqaba, Jordania, Blinken no quiso revelar detalles de los contactos, pero dijo que era importante que Estados Unidos transmitiera mensajes al grupo sobre su conducta y la forma en que pretende gobernar en un período de transición. “Sí, hemos estado en contacto con HTS y con otros grupos”, dijo, y añadió: “Nuestro mensaje al pueblo sirio es este: queremos que tengan éxito y estamos preparados para ayudarles a lograrlo”.
HTS ha trabajado para establecer seguridad e iniciar una transición política después de tomar Damasco y ha intentado tranquilizar a un público sorprendido por la caída de Al Assad y preocupado por los yihadistas extremistas que hay entre los rebeldes. Los líderes insurgentes dicen que el grupo ha roto con su pasado extremista.
(Con información de AP)