Un fondo de defensa creado por simpatizantes de Luigi Mangione, acusado del asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, ha recaudado más de 100.000 dólares a través de la plataforma de crowdfunding GiveSendGo. La creación de este fondo, así como el apoyo recibido, ha generado una fuerte controversia y preocupación entre las autoridades, quienes temen que Mangione esté siendo glorificado como una figura de mártir.
De acuerdo con ABC News, el fondo fue organizado por un grupo anónimo que se hace llamar “The December 4th Legal Committee”, en alusión al día en que Thompson fue asesinado. Según las autoridades, Mangione emboscó y disparó contra Thompson el pasado 4 de diciembre mientras el ejecutivo caminaba hacia una conferencia de accionistas de su empresa en el hotel New York Hilton en Midtown Manhattan.
En un comunicado, los organizadores del fondo señalaron: “No estamos aquí para celebrar la violencia, pero creemos en el derecho constitucional a una representación legal justa”, citó CNN. La campaña, que ha acumulado miles de donaciones anónimas, incluye mensajes de apoyo hacia Mangione. Uno de ellos, firmado por alguien que se identifica como “un ciudadano frustrado”, agradeció a Mangione por “despertar la conciencia en esta nación dormida”.
Crowdfunding y plataformas bajo escrutinio
La plataforma GiveSendGo, conocida por permitir campañas de naturaleza controvertida, defendió su decisión de mantener activo el fondo para la defensa legal de Mangione. En un comunicado enviado a ABC News, un portavoz de la plataforma explicó: “Operamos con el principio de no determinar preemptivamente la culpabilidad o inocencia. Creemos que todas las personas merecen la oportunidad de acceder al debido proceso”. La compañía aclaró que solo elimina campañas que violen explícitamente sus términos de uso y destacó que permite recaudar fondos para defensa legal siempre que estas cumplan con sus políticas.
La campaña en GiveSendGo fue eliminada brevemente antes de ser restaurada el pasado jueves, lo que aumentó la atención pública y mediática sobre el caso. En contraste, otras plataformas de crowdfunding, como GoFundMe, tomaron medidas más estrictas y eliminaron cualquier campaña relacionada con la defensa de Mangione. “Nuestros Términos de Servicio prohíben las recaudaciones de fondos para la defensa legal de crímenes violentos”, explicó GoFundMe en un comunicado, agregando que las donaciones realizadas fueron devueltas a los contribuyentes.
Por su parte, empresas como Amazon y Etsy han retirado productos que mostraban mensajes de apoyo a Mangione, incluyendo camisetas y bolsas de tela con frases como “Free Luigi” y “Deny, Defend, Depose”. Esta última frase coincide con las palabras grabadas en los casquillos de bala recuperados en la escena del crimen, según información proporcionada por la Policía de Nueva York (NYPD).
Respuesta de las autoridades y el equipo legal
El caso ha generado una fuerte reacción por parte de las autoridades. El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, calificó de “perturbador” el apoyo que Mangione ha recibido y advirtió que cualquier intento de glorificar este tipo de actos podría tener consecuencias legales. “Celebrar esta conducta es profundamente preocupante. A quienes están promoviendo esta narrativa, les digo que seremos vigilantes y responsabilizaremos a todos los involucrados”, afirmó Bragg en una entrevista con ABC News.
El caso de Mangione ha sido comparado con episodios similares de alta carga política. Según el exagente del FBI, Richard Frankel, casos como el de Ted Kaczynski (“Unabomber”) y Eric Rudolph, responsables de actos terroristas en Estados Unidos, también atrajeron apoyo público pese a la gravedad de sus crímenes. “Están apoyando a individuos que han cometido actos potencialmente terroristas, aunque tengan una carga política”, señaló Frankel. Sin embargo, advirtió: “Puedes estar en desacuerdo con la industria de la salud, pero no puedes amenazar ni dañar a sus miembros”.
En este contexto, el apoyo a Mangione también ha sido comparado con el caso de Daniel Penny, un veterano de la Marina que fue acusado de homicidio negligente tras matar a un hombre sin hogar en el metro de Nueva York. Penny recibió más de 3 millones de dólares para su defensa legal, aunque finalmente fue absuelto de los cargos.
Entretanto, el abogado de Mangione, Thomas Dickey, afirmó que su cliente se declarará inocente y que no aceptará cargos sin antes someterlos a juicio. En una declaración inicial, Dickey reconoció que las donaciones muestran respaldo público hacia Mangione, pero en una entrevista posterior para CNN, indicó que probablemente no aceptará los fondos recaudados. “Para ser honesto, no me siento cómodo con eso. Aunque mi cliente aprecia el apoyo, no creo que sea lo correcto”, señaló Dickey.
Mangione permanece detenido en Altoona, Pensilvania, donde fue arrestado tras una persecución de cinco días. Actualmente enfrenta cargos adicionales por posesión ilegal de un arma de fuego y documentos falsificados. Mangione ha negado estas acusaciones, al igual que las relacionadas con el asesinato de Thompson, mientras lucha contra su extradición a Nueva York.
Desarrollo de la investigación
La Fiscalía de Manhattan ya comenzó a presentar pruebas ante un gran jurado para lograr una acusación formal contra Mangione. Según la NYPD, los tres casquillos de bala recuperados en la escena del crimen coinciden con el arma encontrada en posesión de Mangione al momento de su arresto. Además, las huellas dactilares del sospechoso fueron halladas en una botella de agua y un envoltorio de granola encontrados cerca del lugar del asesinato, lo que refuerza el caso de la fiscalía.
El asesinato de Thompson ha generado una ola de temor entre ejecutivos del sector sanitario y financiero, especialmente después de que se encontraran carteles en las calles de Manhattan que promovían mensajes contra líderes empresariales.
De acuerdo con un boletín emitido el miércoles 11 de diciembre por el Delaware Valley Intelligence Center, una red de intercambio de inteligencia policial en Filadelfia, usuarios en redes sociales han compartido listas de objetivos y mensajes incitando a más ataques contra figuras corporativas. Uno de estos mensajes, colgado en un paso elevado, incluía nuevamente la frase “Deny, Defend, Depose”.