En un episodio que captó la atención de las autoridades y del público, Cesar M. Hernández, un convicto de asesinato, logró escapar de la custodia mientras era trasladado a una audiencia judicial en Delano, una ciudad ubicada a unos 250 kilómetros al norte de Los Ángeles. El incidente ocurrió en la mañana del lunes, cuando el sujeto, de 34 años, llegó al juzgado a bordo de una camioneta de transporte penitenciario. Según el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California, el preso aprovechó un descuido del personal para saltar del vehículo y huir del lugar.
En el momento de su escape, Hernández vestía un uniforme penitenciario naranja y una prenda térmica blanca, atuendo que las autoridades han descrito en sus llamados al público para facilitar su identificación. La fuga puso en marcha un operativo de búsqueda que incluye a múltiples agencias, mientras la comunidad de Delano permanece en alerta ante la presencia de un fugitivo considerado peligroso.
Cesar Hernández y su historial criminal
La trayectoria delictiva del fugitivo está marcada por su condena por asesinato en primer grado, un crimen por el cual fue sentenciado en 2019 a cumplir 25 años a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional. El caso que llevó a su encarcelamiento fue procesado en el condado de Los Ángeles, y las autoridades lo clasificaron como un delito de “segunda infracción grave”, lo que agrava su historial penal dentro del sistema judicial de California.
Sin embargo, el asesinato no es el único cargo en su contra. Durante su tiempo en prisión, Hernández enfrentó nuevas acusaciones, incluidas las relacionadas con la fabricación de armas dentro del penal en el condado de Kern. Este cargo adicional, al que se declaró no culpable, estaba siendo procesado al momento de su fuga. Según los registros judiciales, el fugitivo se encontraba en Delano para asistir a una audiencia de estado en relación con este caso, que podría haber resultado en una tercera infracción grave. De ser condenado, esto lo haría elegible para una sentencia automática de cadena perpetua bajo la ley de “tres strikes” del estado.
La combinación de su historial criminal, la naturaleza violenta de sus delitos y el contexto de su fuga ha llevado a las autoridades a clasificarlo como un individuo extremadamente peligroso, lo que intensifica la urgencia de su recaptura.
Respuesta de las autoridades ante la fuga
La fuga de Hernández desencadenó una búsqueda exhaustiva liderada por el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California (CDCR), en colaboración con la policía local de Delano y otras agencias de seguridad. Desde el momento de su escape, las autoridades intensificaron los operativos en la región, solicitando el apoyo de la comunidad para localizar al fugitivo.
El CDCR emitió un comunicado detallando las características físicas del convicto: 1,65 metros de altura, 73 kilogramos de peso, cabello negro y ojos marrones. Además, han advertido que se trata de un individuo considerado peligroso, instando a los residentes a no intentar confrontarlo si lo encuentran. En cambio, las autoridades han pedido a cualquier persona que tenga información sobre su paradero que llame inmediatamente al 911 o se comunique con los números habilitados, incluido el 661-721-6300, extensión 5506, para contactar al comandante del incidente, el teniente Anthony Sotello.
El despliegue incluye patrullajes adicionales en la zona y el uso de tecnología para rastrear posibles movimientos de Hernández en áreas cercanas. Las autoridades no han ofrecido detalles específicos sobre los resultados de la búsqueda hasta ahora, pero han confirmado que el fugitivo permanece en libertad al menos hasta el cierre de la tarde del martes.