Nueva York está a punto de experimentar un cambio drástico en su clima debido al impacto de un sistema meteorológico conocido como Alberta Clipper, que traerá temperaturas frías y posiblemente nieve desde Canadá. Después de un período de clima inusualmente templado para esta época del año, los meteorólogos advierten que las temperaturas caerán considerablemente, dejando sentir los efectos de este fenómeno en toda la región noreste de Estados Unidos.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) describe al Alberta Clipper como un sistema de baja presión que se origina en las provincias de Canadá occidental, particularmente en Alberta, y se desplaza rápidamente hacia el sureste, cruzando el Medio Oeste de Estados Unidos y los Grandes Lagos. Este fenómeno suele traer consigo ráfagas de viento, nevadas ligeras pero intensas en algunas áreas y un marcado descenso en las temperaturas.
El meteorólogo de AccuWeather Paul Pastelok explicó que “muchas áreas del norte comenzarán diciembre con temperaturas significativamente por debajo de los promedios históricos”. Para Nueva York, el frío podría ser el más intenso registrado en un inicio de diciembre desde 2019, cuando los máximos diarios oscilaron entre dos y cinco grados Celsius.
Efectos en Nueva York y áreas aledañas
De acuerdo con el pronóstico, los neoyorquinos comenzarán a sentir los efectos del Alberta Clipper durante los primeros días de esta semana. El descenso de las temperaturas será notable y se prolongará al menos hasta el jueves 5 de diciembre, cuando también se espera humedad que podría convertirse en precipitaciones.
Según Fox Weather, mientras algunas partes del estado como Buffalo y Syracuse podrían recibir varios centímetros de nieve debido al efecto del lago, la ciudad de Nueva York se encuentra en el límite donde las precipitaciones podrían variar entre lluvia y nieve.
Para los residentes de Manhattan y las áreas circundantes, la posibilidad de nieve acumulada es baja, pero podrían registrarse algunas nevadas ligeras en las primeras horas del jueves. Si bien es más probable que los neoyorquinos necesiten paraguas en lugar de palas, los meteorólogos recomiendan mantenerse atentos a los cambios en el pronóstico. En contraste, zonas costeras como Connecticut y Massachusetts enfrentarán un clima inestable con una mezcla de lluvia y nieve impulsada por los vientos fuertes característicos del Alberta Clipper.
Un invierno más frío que el anterior
Este inicio abrupto del invierno meteorológico parece ser un preludio de una temporada significativamente más fría y nevada en comparación con el año pasado. AccuWeather predice que Nueva York podría recibir hasta 60 centímetros de nieve durante este invierno, lo que representaría un aumento notable respecto a los 19 centímetros registrados el año pasado.
El invierno meteorológico, que siempre comienza el 1 de diciembre y dura 91 días, es distinto del invierno astronómico, que este año inicia el 21 de diciembre. Según expertos, el invierno meteorológico facilita el análisis y registro de datos climáticos con mayor consistencia, permitiendo a los meteorólogos hacer predicciones más precisas.
La última nevada significativa en Nueva York se registró el 15 de enero de este año, cuando una tormenta dejó caer 4 centímetros de nieve en Central Park, rompiendo un período de más de 700 días sin nevadas considerables. Sin embargo, este invierno se perfila como mucho más activo en términos de acumulación de nieve.
Impacto en otras regiones del estado y actividades deportivas
En el norte del estado, áreas como Buffalo y Syracuse están experimentando condiciones más severas debido al efecto del lago, un fenómeno que intensifica las nevadas al combinarse la humedad del lago con el aire frío. Estas ciudades podrían acumular varios centímetros de nieve adicionales durante los próximos días, complicando el tránsito y las actividades diarias.
El domingo 1 de diciembre, los aficionados al fútbol americano en Orchard Park, hogar de los Buffalo Bills, fueron testigos de las condiciones invernales mientras presenciaban el partido contra los San Francisco 49ers. Para el inicio del juego, se habían acumulado alrededor de 12 centímetros de nieve, y las precipitaciones continuaron durante el partido, creando un campo resbaladizo que se convirtió en un desafío adicional para los jugadores.
Aunque el impacto en la ciudad de Nueva York será menor en comparación con otras áreas del estado, los residentes deben prepararse para temperaturas notablemente más frías y posibles condiciones de hielo. El NWS insta a los ciudadanos a tomar precauciones al viajar, ya que las carreteras podrían volverse peligrosas en caso de que las precipitaciones se conviertan en nieve o aguanieve.
Para los habitantes del norte del estado y áreas propensas a nevadas, las autoridades han emitido advertencias para que estén atentos a las actualizaciones del clima y eviten desplazamientos innecesarios. La nieve acumulada y los vientos fuertes podrían causar interrupciones en el suministro eléctrico y generar dificultades en el transporte.
Por otro lado, el sistema Alberta Clipper no solo impactará a Nueva York, sino que afectará a un total de 16 estados, extendiéndose hacia el este y el sur a medida que avanza. Se espera que regiones del Medio Oeste, los Grandes Lagos y el noreste sean las más afectadas por las bajas temperaturas y las precipitaciones invernales.