Este es el único vicepresidente de Estados Unidos cuya canción llegó al número uno, conoce el éxito que conquistó a grandes artistas

Charles G. Dawes, vicepresidente de Estados Unidos entre 1925 y 1929, es recordado por su destacada labor política y diplomática durante el gobierno de Calvin Coolidge. Sin embargo, un aspecto menos conocido de su vida lo conecta con la música popular, donde su contribución marcó un hito único en la historia cultural del país. Dawes es el único vicepresidente estadounidense que ha compuesto una canción que llegó al primer lugar en las listas de éxitos.

La composición, conocida como “Melody in A Major”, surgió en 1911 mucho antes de que Dawes asumiera cargos públicos. Décadas después, esta pieza instrumental se transformó en el éxito “It’s All in the Game”, gracias a las letras añadidas por el compositor Carl Sigman. El impacto de esta canción se extendió a nivel mundial, consolidando a Dawes como una figura singular que conectó la política con la música.

Además de su legado musical, Dawes recibió el Premio Nobel de la Paz en 1925 por su papel en el diseño del Plan Dawes, destinado a aliviar las tensiones económicas en Europa tras la Primera Guerra Mundial. Este reconocimiento, sumado a su contribución a la música, lo coloca en una posición única en la historia mundial.

Charles G. Dawes, nacido en Ohio en 1865, fue un político, diplomático y economista. Su carrera política alcanzó su punto más alto cuando asumió la vicepresidencia de Estados Unidos en 1925. Según American Songwriter, Dawes también era un músico autodidacta que, en 1911, compuso la pieza instrumental “Melody in A Major” en su residencia de Evanston, Illinois.

De acuerdo con American Songwriter, la melodía fue publicada luego de que un amigo de Dawes, el violinista Francis MacMillen, llevara la partitura a un editor. La pieza rápidamente ganó popularidad y, en la década de 1920, fue interpretada por músicos como Fritz Kreisler y la orquesta de Adolf G. Hoffmann en eventos oficiales a los que asistía Dawes.

La publicación de “Melody in A Major” tomó por sorpresa a Dawes, quien expresó humor sobre su inesperada incursión en la música, según relatos documentados en American Songwriter. Este evento marcó el inicio de su conexión con el mundo artístico, que décadas más tarde le otorgaría reconocimiento en la música pop.

En 1951, Carl Sigman, compositor y letrista reconocido por colaborar con artistas como Frank Sinatra y Elvis Presley, añadió letras a “Melody in A Major”, transformándola en la canción “It’s All in the Game”. Según Billboard, la canción relata una historia de amor con momentos de tensión y reconciliación, lo que la hizo atractiva para un público amplio.

La versión más famosa de “It’s All in the Game” fue grabada en 1958 por Tommy Edwards, quien logró que el tema alcanzara el primer lugar en la lista Billboard Hot 100 durante seis semanas. Según Billboard, esto convirtió a Edwards en el primer artista afroamericano en liderar dicha lista y a Dawes en el único vicepresidente estadounidense acreditado con un éxito musical número uno.

Además, la canción fue un éxito internacional, llegando al primer puesto en el Reino Unido, y su impacto perdura hasta la actualidad como un clásico de la música popular, según American Songwriter.

Además de su faceta musical, Charles G. Dawes fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1925 por su contribución al diseño del Plan Dawes. Según Nobel Prize, este acuerdo buscaba aliviar las tensiones económicas entre Francia y Alemania después de la Primera Guerra Mundial, facilitando el pago de reparaciones de guerra y promoviendo la estabilidad económica en Europa.

El reconocimiento internacional que recibió por su labor diplomática, sumado a su conexión con la música, lo convierte en una figura única. Según Nobel Prize, Dawes y Bob Dylan son las únicas personas en la historia que han ganado un Premio Nobel y han sido acreditadas con un éxito número uno en las listas de música.

Desde su lanzamiento como éxito pop, “It’s All in the Game” ha sido interpretada por diversos artistas y se ha consolidado como un estándar de la música popular. Según American Songwriter, figuras como Nat King Cole, Glen Campbell, Elton John y Barry Manilow han grabado versiones de la canción, llevándola a públicos de distintos géneros y generaciones.

Entre las interpretaciones más notables se encuentra la de Merle Haggard, quien incluyó el tema en su álbum de 1984, y la de Van Morrison, que la incorporó a su disco Into the Music en 1979. Según Billboard, estas versiones han contribuido a mantener viva la relevancia de la canción y el legado musical de Dawes.