Retiran más de 75.000 kilos de carne molida en Estados Unidos por riesgo de contaminación con E. coli

La empresa Wolverine Packing Co., con sede en Detroit, ordenó el retiro de aproximadamente de más de 75.000 libras de carne molida fresca y congelada debido a una posible contaminación con la peligrosa bacteria E. coli O157:H7, según informó el Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (FSIS).

Los productos afectados, destinados exclusivamente al sector de restaurantes, han sido distribuidos a lo largo de todo el país, lo que ha generado una preocupación generalizada en torno a su consumo. Las autoridades sanitarias instaron a desechar o devolver estos alimentos y evitar su consumo bajo cualquier circunstancia, según CNN.

Los productos afectados se distinguen por el número de establecimiento “EST. 2574B”, ubicado dentro del sello de inspección del USDA. La carne molida fresca cuenta con una fecha de consumo preferente del 14 de noviembre de 2024, mientras que los productos congelados tienen marcada una fecha de producción del 22 de octubre de 2024.

El FSIS alertó que algunos lotes podrían permanecer almacenados en refrigeradores o congeladores de restaurantes. En consecuencia, los operadores de estos establecimientos han sido instruidos para revisar minuciosamente sus existencias y asegurarse de retirar cualquier producto sospechoso.

El brote fue identificado inicialmente en el estado de Minnesota, donde el Departamento de Agricultura local notificó al FSIS el pasado 13 de noviembre sobre un grupo de casos de enfermedad relacionados con el consumo de carne molida. Según las autoridades, 15 personas han enfermado hasta ahora, con síntomas que comenzaron entre el 2 y el 10 de noviembre.

Posteriormente, el 20 de noviembre, una muestra recolectada como parte de la investigación dio positivo para E. coli O157:H7, confirmando la relación entre la carne contaminada de Wolverine Packing Co. y los casos de enfermedad reportados, de acuerdo con NBC News.

Las investigaciones siguen en curso, con la participación conjunta del FSIS y los departamentos de Agricultura y Salud de Minnesota. La carne molida retirada fue distribuida en todo el territorio estadounidense, lo que aumenta el riesgo de que productos contaminados permanezcan en inventarios de restaurantes, por lo que aún no se descarta que puedan surgir más casos en otros estados debido a la distribución nacional de los productos.

La E. coli O157:H7 es una bacteria que puede causar graves problemas de salud en humanos. Los síntomas incluyen calambres estomacales severos; diarrea, que a menudo puede ser sanguinolenta, y fiebre moderada en algunos casos.

La mayoría de las personas infectadas se recuperan en un período de entre cinco y siete días. Sin embargo, en casos graves, la bacteria puede desencadenar el síndrome urémico hemolítico (HUS), una complicación potencialmente mortal que afecta los riñones y que ocurre en el 5-10% de los pacientes infectados, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

El HUS puede causar daño permanente a los riñones, hipertensión crónica y, en casos extremos, la muerte. Entre los síntomas principales del HUS se encuentran: fiebre, fatiga extrema, disminución en la frecuencia de la micción, palidez y aparición de hematomas inexplicables.

Las personas más vulnerables a esta complicación son los niños menores de cinco años, los adultos mayores y aquellos con sistemas inmunológicos debilitados, como pacientes con cáncer. Las autoridades sanitarias recomiendan buscar atención médica inmediata ante cualquier signo de HUS.

El FSIS resaltó la importancia de cocinar todos los productos de carne molida a una temperatura interna de 71 grados Celsius para garantizar la eliminación de bacterias dañinas. Asimismo, recordó la importancia de manipular y preparar los alimentos siguiendo prácticas seguras para evitar la contaminación cruzada.

En un comunicado dirigido a los medios, Wolverine Packing Co. aseguró estar colaborando estrechamente con el FSIS y los departamentos estatales para gestionar la crisis. La empresa afirmó haber notificado a todos los clientes afectados y estar realizando una exhaustiva auditoría interna de sus procesos.

“Estamos llevando a cabo una revisión intensiva de proveedores y medidas de control de calidad para mantener los más altos estándares de producción”, dijo la compañía. “Como empresa familiar de tercera generación con casi 90 años de experiencia, nuestra prioridad es la seguridad de los alimentos y los consumidores”, citó NBC News.

Las personas que hayan consumido los productos retirados y presenten síntomas de infección deben buscar atención médica sin demora. Los profesionales de la salud pueden realizar pruebas específicas para confirmar la presencia de E. coli y administrar el tratamiento adecuado. Si bien la mayoría de los pacientes se recuperan sin complicaciones, la atención temprana es crucial para evitar complicaciones graves, como el HUS.