Gerald Boyle, reconocido abogado defensor en Milwaukee, falleció el 17 de noviembre a los 88 años. Su hija, Bridget Boyle, anunció su muerte en una publicación en Facebook, donde destacó su dedicación a la justicia y su extensa trayectoria profesional. No se reveló la causa del fallecimiento, pero Boyle había enfrentado problemas de salud desde 2017, según Milwaukee Journal Sentinel.
Boyle adquirió notoriedad nacional en 1992 al representar al asesino en serie Jeffrey Dahmer, quien fue acusado de violación, asesinato y desmembramiento de 17 hombres y adolescentes entre 1978 y 1991. Durante el juicio, transmitido a nivel nacional por Court TV, Boyle presentó una defensa basada en enfermedad mental, la cual no fue aceptada por el jurado. Dahmer fue condenado a 15 cadenas perpetuas y asesinado en prisión en 1994, de acuerdo con FOX6 News y People.
Bridget Boyle señaló que su padre creía en la humanidad incluso en los casos más complejos. Como ejemplo, recordó que durante la defensa de Dahmer, financió un vuelo para que la madre del acusado pudiera visitarlo en prisión, según declaraciones recogidas por la periodista Anne Schwartz citadas en FOX6 News.
Además del caso de Dahmer, Boyle llevó otros litigios de alto perfil. En 2000, defendió al exjugador de los Green Bay Packers Mark Chmura, quien fue acusado de agredir sexualmente a una joven de 17 años. Chmura fue finalmente absuelto. También representó a John Maloney, un detective acusado de asesinar a su esposa, y a un ejecutivo de Miller Brewing en un caso laboral que inicialmente resultó en una indemnización de 24.7 millones de dólares, aunque esta fue anulada en apelación, según Milwaukee Journal Sentinel.
El abogado enfrentó desafíos en la última etapa de su carrera. En 2018, perdió su licencia debido a problemas de salud y un historial de quejas éticas, de acuerdo con Milwaukee Journal Sentinel. En declaraciones al medio, Boyle expresó que no esperaba recuperarse tras una cirugía en 2017, refiriéndose a su situación como “una realidad de la vida”.
Boyle comenzó su carrera en Milwaukee después de graduarse de la Facultad de Derecho de la Universidad Marquette en 1962. Posteriormente, trabajó en la oficina del fiscal de distrito del condado de Milwaukee y ascendió a subfiscal de distrito. En 1968, compitió sin éxito por el puesto de fiscal de distrito contra E. Michael McCann, quien luego sería su oponente en el juicio de Dahmer, según Milwaukee Journal Sentinel.
Colegas y allegados describieron a Boyle como un abogado que dominaba los argumentos de cierre y el interrogatorio de testigos. Estas habilidades le permitieron conectar con jurados en numerosos casos. McCann, quien procesó a Dahmer, lo calificó como un rival formidable y un profesional íntegro. Por su parte, el abogado Jonathan Smith, quien trabajó con Boyle entre 1995 y 2002, destacó su capacidad para relacionarse tanto con clientes como con jurados. Mientras tanto, el productor Andy Regal lo recordó como una figura clave durante la cobertura mediática del caso Dahmer, de acuerdo con FOX6 News y Milwaukee Journal Sentinel.
A lo largo de su carrera, Boyle se ganó el respeto de la comunidad jurídica y los medios de comunicación. Su estilo persuasivo y su enfoque humano fueron citados como características que marcaron su trabajo. En entrevistas previas, Boyle enfatizó la importancia de tratar a los acusados como personas, independientemente de sus crímenes, una enseñanza que transmitió a sus hijos, según People y Milwaukee Journal Sentinel.
En el ámbito personal, Boyle estuvo casado durante 59 años con Marna, con quien tuvo tres hijos: Bridget, Ellen y Gerald. Era un seguidor apasionado de los Green Bay Packers y murió mientras veía un partido en casa con su esposa. Su legado, según familiares y colegas, trasciende su participación en casos mediáticos y se centra en su compromiso con el sistema judicial y las personas que defendió, de acuerdo con FOX6 News y Milwaukee Journal Sentinel.