El noroeste de Estados Unidos fue azotado el martes 19 de noviembre de 2024 por un ciclón bomba, fenómeno meteorológico caracterizado por un rápido descenso de la presión atmosférica que intensifica los vientos y genera lluvias torrenciales. En esta ocasión, las ráfagas alcanzaron los 83 km/h (52 mph), provocando daños significativos en Seattle y sus alrededores.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés), esta tormenta dejó un saldo preliminar de al menos una persona fallecida y varios heridos. Además, cientos de miles de hogares y negocios permanecieron sin electricidad debido a la caída de árboles y líneas eléctricas en toda la región.
La tormenta también complicó el transporte aéreo y terrestre, con incidentes como el de un avión que logró aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma a pesar de las extremas condiciones climáticas. Las autoridades locales han emitido advertencias y continúan trabajando en la restauración de servicios básicos.
¿Qué es un ciclón bomba y cómo afecta a las regiones costeras?
Un ciclón bomba es un sistema de tormentas que se caracteriza por una rápida caída de presión atmosférica, generalmente 24 milibares en menos de 24 horas, según el NWS. Este fenómeno incrementa significativamente la intensidad de los vientos y puede generar lluvias torrenciales y oleaje elevado en áreas costeras.
Según el Centro de Predicción del Tiempo (WPC, por sus siglas en inglés), estos eventos ocurren con mayor frecuencia durante los meses de invierno y afectan regiones costeras, especialmente cuando interactúan sistemas de baja y alta presión. En el caso del noroeste del Pacífico, la tormenta se intensificó al combinarse con un frente frío previamente activo.
Un muerto y dos heridos tras la caída de un árbol en Maple Valley
Uno de los incidentes más graves ocurrió en Maple Valley, una comunidad al sur de Seattle. Un árbol cayó sobre un remolque residencial, dejando a dos personas atrapadas entre los escombros. Según Puget Sound Fire, una de las víctimas fue rescatada en pocos minutos, mientras que la otra requirió una operación de más de una hora debido a las condiciones de los restos estructurales.
Ambas personas fueron trasladadas a hospitales locales. Las autoridades no han proporcionado detalles sobre sus estados de salud. Este incidente resalta el peligro asociado con la caída de árboles durante tormentas con vientos extremos.
Caos en Seattle-Tacoma: aterrizaje bajo vientos extremos
El transporte aéreo también enfrentó desafíos significativos. Un video difundido por redes sociales muestra a un avión realizando un aterrizaje en el Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma bajo ráfagas de 52 mph (83 km/h). El piloto logró completar la maniobra sin incidentes, lo que destacó la magnitud de los retos enfrentados por la aviación en medio de la tormenta.
A pesar del éxito de este aterrizaje, la tormenta generó retrasos y cancelaciones de vuelos. Según autoridades del aeropuerto, las medidas de seguridad adicionales incluyeron revisiones constantes de pistas y sistemas eléctricos afectados por los vientos y la lluvia.
Más de 200,000 personas sin electricidad en Washington
Los cortes de energía afectaron a una vasta porción de la región. Según datos de Puget Sound Energy, al menos 200,000 usuarios quedaron sin servicio eléctrico debido a la caída de árboles y líneas de transmisión. Seattle City Light, otra compañía de energía, informó que los cortes afectaron principalmente a áreas urbanas y suburbanas.
Los equipos de emergencia trabajaron en la remoción de árboles caídos y la reparación de infraestructura eléctrica, pero las autoridades advirtieron que la restauración del servicio podría tardar varios días en las áreas más afectadas.
Primera advertencia de vientos fuertes desde 2022
El ciclón bomba marcó la primera vez en dos años que Seattle recibe una advertencia de vientos fuertes, según el NWS. Las autoridades locales pidieron a los residentes permanecer en sus hogares, evitar desplazamientos innecesarios y mantenerse informados a través de canales oficiales.
Además, el Departamento de Transporte del estado de Washington señaló que varias carreteras principales fueron cerradas temporalmente debido a la caída de árboles y deslizamientos de tierra. Los trabajos de limpieza y reparación se extendieron durante toda la noche y la madrugada.