Las autoridades de California arrestaron a cuatro personas en Los Ángeles acusadas de organizar un fraude de seguros mediante la simulación de ataques de oso a automóviles de lujo utilizando un disfraz. La investigación, conocida como “Operación Garra de Oso”, reveló que los sospechosos habrían reclamado un total de USD 141,839 en daños a través de tres aseguradoras distintas, según informaron funcionarios del Departamento de Seguros de California. Los arrestos incluyen a Ruben Tamrazian, de 26 años, Ararat Chirkinian, de 39, Vahe Muradkhanyan, de 32, todos residentes de Glendale, y Alfiya Zuckerman, de 39, de Valley Village, quienes enfrentan cargos por fraude de seguros y conspiración, de acuerdo con la NBC Los Angeles.
La serie de eventos comenzó el 28 de enero de 2024, cuando los sospechosos presentaron tres reclamaciones por separado a diversas aseguradoras, argumentando que un oso había ingresado a sus vehículos en la zona montañosa de Lake Arrowhead, en el condado de San Bernardino, y causado daños internos. Los reclamos incluían evidencia en video en la que supuestamente se observaba al oso entrando a los automóviles y causando destrozos en los interiores, informó la CBS News. Según el Departamento de Seguros de California, los vehículos involucrados fueron un Rolls Royce Ghost de 2010, un Mercedes G63 AMG de 2015 y un Mercedes E350 de 2022.
Las aseguradoras comenzaron a sospechar de la autenticidad de las reclamaciones al notar ciertas coincidencias entre los videos y los reportes presentados. Los tres clips de seguridad mostraban el mismo entorno exterior y similares marcas de daños en los asientos y paneles de las puertas de los vehículos. Además, la inspección de las imágenes reveló inconsistencias en el comportamiento del supuesto animal, indicó CBS News. A medida que el caso avanzaba, el Departamento de Seguros involucró a un biólogo del Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California, quien concluyó que la figura del “oso” era en realidad una persona usando un disfraz, explicó la San Francisco Chronicle.
La intervención del biólogo fue clave para respaldar la teoría del fraude. Tras analizar detenidamente las imágenes, el especialista en vida silvestre determinó que la postura y los movimientos del supuesto oso eran inusuales y que no coincidían con el comportamiento típico de un animal salvaje. Este análisis fue presentado como evidencia ante las autoridades, quienes confirmaron que los reclamos eran fabricados, según NBC Los Angeles. De acuerdo con fuentes de la investigación, en los videos se observa a una figura con un traje de oso realizando movimientos extraños y visibles fallos en la actuación del “animal” que, según el experto, reflejaban claramente la intervención de un humano.
El Departamento de Seguros de California solicitó una orden de registro para las residencias de los sospechosos en Glendale y Valley Village. Durante el registro, las autoridades encontraron un disfraz de oso y un par de “garras de carne”, que habrían sido utilizadas para imitar las marcas de rasguños en los vehículos. La evidencia hallada en el domicilio fue registrada como prueba para confirmar las actividades fraudulentas de los implicados. La NBC Los Angeles reportó que, hasta el momento, no se ha confirmado cuál de los cuatro detenidos habría utilizado el disfraz para los videos de los ataques simulados.
La estrategia de los sospechosos incluyó la presentación del mismo video en las tres reclamaciones, lo que facilitó que las aseguradoras notaran el esquema fraudulento. De acuerdo con CBS News, las imágenes mostraban un ambiente exterior común en las tres reclamaciones, en las que se aprecia al “oso” interactuando con los vehículos de manera poco convincente. Este detalle resultó fundamental en la apertura de la investigación “Operación Garra de Oso”, donde el Departamento de Seguros coordinó con el Departamento de Pesca y Vida Silvestre y otras agencias de la región para reunir pruebas adicionales.
La NBC Los Angeles informó que el monto defraudado, estimado en USD 141,839, corresponde a las compensaciones solicitadas por los daños en los tres vehículos. Tras analizar los videos, las compañías aseguradoras colaboraron en la investigación para desmantelar el esquema y evitar pagos por reclamaciones que, finalmente, se determinaron como fraudulentas, de acuerdo con la San Francisco Chronicle. Los cargos contra los cuatro sospechosos incluyen fraude de seguros y conspiración para defraudar a múltiples aseguradoras mediante la manipulación de pruebas visuales y el uso de disfraces.
El Departamento de Seguros también señaló que los daños observados en los vehículos consistían en rasguños superficiales en los paneles de las puertas y en los asientos, marcas que habrían sido producidas de manera intencionada para simular el comportamiento de un oso. Según el análisis de las imágenes y el peritaje en los vehículos, la falta de profundidad en los daños y la consistencia de los mismos en los tres automóviles fueron factores claves para alertar a las compañías aseguradoras, según CBS News.
Finalmente, las autoridades indicaron que la “Operación Garra de Oso” continúa en curso mientras los investigadores examinan si existen otros posibles incidentes o reclamos relacionados con el grupo detenido. La participación del Departamento de Seguros, junto con las fuerzas del orden locales, fue fundamental para descubrir el fraude y evitar pagos indebidos. Hasta el momento, los sospechosos se encuentran en espera de su primera comparecencia judicial en Los Ángeles, donde se determinará la posible condena para cada uno de los implicados, según NBC Los Angeles.