Esther Thelus, una mujer de 26 años de Orlando, enfrenta cargos de asesinato en primer grado y tentativa de asesinato tras presuntamente iniciar un incendio que causó la muerte de su hijo de ocho meses y heridas a su hijo mayor de dos años, según la Oficina del Sheriff del Condado de Orange. Los hechos ocurrieron el 26 de agosto, cuando Thelus, presuntamente motivada por una sensación de “humillación”, utilizó gasolina para rociarse a sí misma y a sus dos hijos antes de prenderles fuego en su residencia ubicada en Hiawassee Oak Drive, en el área oeste de Orlando, de acuerdo con NBC Miami.
Las autoridades revelaron que Thelus fue vista en una cámara de seguridad de una tienda 7-Eleven adquiriendo gasolina y un encendedor el mismo día del incidente. De acuerdo con NBC Miami, Thelus había manifestado la intención de mudarse a Fort Lauderdale con su hijo menor, mientras que el padre del niño de dos años y su madre, quienes habían solicitado una prueba de ADN para confirmar la paternidad, rechazaron quedarse con el niño. Luego de que la familia paterna devolviera al niño mayor, Thelus se dirigió a la gasolinera y realizó las compras mencionadas antes de regresar a casa.
En una entrevista con la estación WESH de NBC, la empleada de la tienda de combustible Marie Jean relató el encuentro con Thelus, quien intentó llenar un recipiente de agua con gasolina, lo que generó suspicacias entre los presentes. Otro cliente incluso se ofreció a ayudarle dándole un recipiente adecuado para almacenar gasolina, sin tener conocimiento del propósito real de la compra. Jean expresó que desde ese día ha experimentado secuelas emocionales tras el suceso, ya que todo el material necesario para el incendio fue adquirido en la tienda donde trabaja, según WESH.
La Oficina del Sheriff del Condado de Orange y el informe policial indican que, al regresar a casa, Thelus prendió fuego a sus hijos en presencia de su compañera de cuarto y la hija de esta, quien al ver las llamas gritó: “¡Están todos en llamas!” Los vecinos reaccionaron rápidamente usando toallas para sofocar el fuego, mientras que el hijo de dos años fue hospitalizado con quemaduras leves, y el bebé de ocho meses sufrió quemaduras en el 80% de su cuerpo. Las autoridades señalaron que paramédicos resucitaron al bebé de ocho meses en el trayecto al hospital, donde falleció aproximadamente dos meses después, el 25 de octubre, de acuerdo con Law & Crime.
Los investigadores del caso explicaron que, al ser confrontada, Thelus justificó su conducta alegando que había sido sometida a una “humillación” excesiva. Según Law & Crime, la madre permanece internada con quemaduras en más del 50% de su cuerpo y se encuentra en espera de un juicio programado para el 12 de noviembre. La Oficina del Sheriff confirmó los cargos de asesinato en primer grado y tentativa de asesinato, mientras que el niño mayor, que se espera sobreviva, fue dado de alta poco después de recibir atención médica.
Otros medios como The Miami Herald informaron que Thelus permanece bajo custodia mientras se recupera de las heridas en un hospital local. Los registros públicos no han indicado aún los motivos específicos que llevaron a Thelus a cometer el acto, aunque las autoridades han corroborado que el uso de gasolina fue intencional y que Thelus realizó las compras de los materiales en la gasolinera antes de regresar a su residencia. McClatchy News, medio que sigue el caso, informó que para no comprometer la identidad del hijo sobreviviente, las autoridades han evitado divulgar el nombre del menor. La próxima comparecencia judicial de Thelus se programó para el 12 de noviembre.
Un informe adicional del Orlando Sentinel precisó que el Departamento de Rescate de Incendios del Condado de Orange respondió a la emergencia en la residencia de Thelus en el bloque 7200 de Hiawassee Oak Drive. La agencia confirmó que las llamas en el lugar fueron originadas por gasolina vertida dentro de la vivienda, lo que resultó en un incendio devastador que dejó gravemente heridos a los dos menores. La madre, quien permanece bajo tratamiento médico, fue arrestada y enfrenta cargos formales de asesinato en primer grado en relación con la muerte de su hijo menor, identificado como Davinci Joseph, de ocho meses.