EEUU investiga la presunta detención de un periodista iraní-estadounidense en Teherán

• Reza Valizadeh, periodista iraní-estadounidense, habría sido detenido por el régimen persa.
• El Departamento de Estado norteamericano está recabando información a través de Suiza, su poder protector en Irán.
• Valizadeh trabajó en el pasado para Radio Farda, un medio financiado por el gobierno estadounidense.

Lo esencial: el Departamento de Estado norteamericano confirmó que está investigando la posible detención del periodista iraní-estadounidense Reza Valizadeh en Teherán. Valizadeh había trabajado para Radio Farda, emisora hostil para el régimen iraní, y en agosto afirmó haber regresado a Irán sin garantías de seguridad. Los rumores sobre su arresto se intensificaron, y una ONG confirmó que fue enviado a la prisión de Evin tras un juicio en el Tribunal Revolucionario. Las celebraciones por el 45 aniversario de la toma de la embajada de EEUU coincidieron con tensiones crecientes, incluyendo amenazas del ayatolá Khamenei hacia EEUU e Israel.

Las autoridades de Estados Unidos investigan la posible detención de un periodista iraní-estadounidense que una vez trabajó para una emisora financiada por el gobierno norteamericano.

El presunto encarcelamiento de Reza Valizadeh se habría producido cuando Irán conmemoraba el domingo el 45 aniversario de la toma de la embajada estadounidense y la crisis de los rehenes. También después de que el líder supremo del régimen, el ayatolá Alí Khamenei, amenazara el día anterior tanto a Israel como a Estados Unidos con “una respuesta aplastante”, mientras bombarderos B-52 de largo alcance llegaban a Oriente Próximo en un intento de disuadir a Teherán.

Valizadeh había trabajado para Radio Farda, una emisora dependiente de Radio Free Europe/Radio Liberty y supervisada por la Agencia de Estados Unidos para los Medios Globales. En febrero, escribió en la plataforma social X que habían detenido a miembros de su familia para intentar que regresara a Irán.

En agosto, Valizadeh publicó al parecer dos mensajes en los que daba a entender que había regresado a Irán a pesar de que la teocracia iraní considera a Radio Farda un medio hostil.

“Llegué a Teherán el 6 de marzo de 2024. Antes de eso, tuve negociaciones inacabadas con el departamento de inteligencia (de la Guardia Revolucionaria)”, decía en parte el mensaje. “Finalmente regresé a mi país después de 13 años sin ninguna garantía de seguridad, ni siquiera verbal”.

Valizadeh añadía el nombre de un hombre que, según él, pertenecía al Ministerio de Inteligencia iraní. La AP no pudo verificar si la persona trabajaba para el ministerio.

Hacía semanas que circulaban rumores de que Valizadeh había sido detenido. La Agencia de Noticias de Activistas por los Derechos Humanos, que hace un seguimiento de los casos en Irán, afirmó que había sido detenido a su llegada al país a principios de año, pero posteriormente puesto en libertad.

Fue detenido de nuevo y enviado a la prisión de Evin, donde ahora se enfrenta a un caso en el Tribunal Revolucionario de Irán, que celebra habitualmente audiencias a puerta cerrada en las que los acusados se enfrentan a pruebas secretas, informó la agencia. Valizadeh ya había sido detenido en 2007, según la agencia.

El Departamento de Estado norteamericano reconoció a la agencia AP que era “consciente de los informes de que este ciudadano con doble nacionalidad estadounidense e iraní ha sido detenido en Irán” cuando se le preguntó por Valizadeh.

“Estamos trabajando con nuestros socios suizos que sirven como poder protector de Estados Unidos en Irán para reunir más información sobre este caso”, dijo el Departamento de Estado. “Irán encarcela de forma rutinaria a ciudadanos estadounidenses y de otros países injustamente con fines políticos. Esta práctica es cruel y contraria al derecho internacional”.

Irán no ha reconocido haber detenido a Valizadeh. La misión de Irán ante las Naciones Unidas no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

La Voz de América, otro medio de comunicación financiado por el gobierno estadounidense y supervisado por la Agencia de Medios de Comunicación Globales, fue la primera en informar de que el Departamento de Estado reconocía la detención de Valizadeh en Irán.

Desde la crisis de la embajada estadounidense de 1979, que supuso la liberación de decenas de rehenes tras 444 días de cautiverio, Irán ha utilizado a presos con vínculos occidentales como moneda de cambio en las negociaciones con el mundo. En septiembre de 2023, cinco estadounidenses detenidos durante años en Irán fueron liberados a cambio de cinco iraníes bajo custodia estadounidense y de que Corea del Sur liberara 6.000 millones de dólares en activos iraníes congelados.

Valizadeh es el primer estadounidense conocido detenido por Irán desde entonces.

Mientras tanto, la televisión estatal iraní emitió el domingo imágenes de distintas ciudades del país celebrando el aniversario de la toma de la embajada.

El general Hossein Salami, jefe de la Guardia, también habló en Teherán, donde repitió una promesa hecha el día anterior por Khamenei.

“El frente de resistencia e Irán se equiparán con todo lo necesario para hacer frente y derrotar al enemigo”, dijo, refiriéndose a los grupos terroristas como Hamas y Hezbollah del Líbano respaldados por Teherán.

En Teherán, miles de personas corearon en la puerta de la antigua embajada de Estados Unidos “Muerte a Estados Unidos” y “Muerte a Israel”. Algunos quemaron banderas de los países y efigies del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

También portaban imágenes de altos cargos asesinados de grupos militantes aliados de Irán, como el líder libanés de Hezbollah, Hassan Nasrallah, y el líder palestino de Hamas, Yahya Sinwar. En las concentraciones organizadas por el Estado, la multitud coreaba que estaba dispuesta a defender a los palestinos.

(Con información de AP)