Los votantes de Wisconsin se preparan para una decisión importante en las próximas elecciones de noviembre, donde considerarán una enmienda constitucional que tiene como objetivo explícitamente prohibir el voto de no ciudadanos en elecciones estatales y locales. Esta propuesta, presentada por legisladores republicanos, se encuentra en la boleta como un referéndum que busca cambiar la redacción del artículo III, sección 1 de la constitución estatal. Actualmente, el texto menciona que “cada ciudadano de los Estados Unidos de 18 años o más” tiene derecho a votar, mientras que la enmienda propuesta especificaría que “solo un ciudadano de los Estados Unidos de 18 años o más que resida en un distrito electoral puede votar”, según un informe de Fox News.
La enmienda surge en un contexto donde varios estados han implementado medidas similares. Hasta la fecha, estados como Alabama, Florida y Colorado han adoptado cambios en sus constituciones para clarificar que el derecho al voto se reserva exclusivamente a ciudadanos estadounidenses. Este tipo de medidas se han visto como parte de una tendencia más amplia impulsada por los republicanos en respuesta a preocupaciones sobre la integridad electoral en medio de un aumento en la migración. La administración Biden ha reportado más de 10 millones de encuentros con inmigrantes indocumentados en las fronteras desde que asumió el cargo, de acuerdo con The Associated Press.
Los patrocinadores de la enmienda argumentan que esta acción es necesaria para asegurar que los votos no sean diluidos en el futuro. El senador estatal Julian Bradley, uno de los impulsores, enfatizó que es mejor abordar esta cuestión antes de que se convierta en un problema real, según Fox News. Sin embargo, los opositores a la enmienda sostienen que su efectividad es cuestionable, dado que no hay ninguna municipalidad en Wisconsin que actualmente permita el voto de no ciudadanos. Jeff Mandell, abogado de la organización Law Forward, indicó que esta enmienda representa “una solución en busca de un problema”, de acuerdo con The Associated Press.
El debate sobre la enmienda también incluye un trasfondo legal. Según una ley federal de 1996, está prohibido que no ciudadanos voten en elecciones federales. Sin embargo, esta ley no se extiende a las elecciones estatales y locales, lo que ha permitido que algunos municipios en otros estados, como California y Maryland, permitan el voto de no ciudadanos en elecciones locales, según The Associated Press. Los republicanos argumentan que este tipo de precedentes podría llevar a un aumento de las jurisdicciones que permiten el voto de no ciudadanos, lo que ha incentivado su impulso legislativo.
La enmienda debe ser aprobada en dos sesiones legislativas consecutivas y luego ser respaldada por un referéndum estatal para poder entrar en vigor. Esta medida fue aprobada por los legisladores republicanos en 2022 y nuevamente en 2023, sin obtener el apoyo de los demócratas en ninguna de las votaciones, según Fox News. El gobernador demócrata Tony Evers no tiene un papel en la aprobación de enmiendas constitucionales.
La oposición a la enmienda es amplia. Más de 30 organizaciones, incluyendo la Unión Americana de Libertades Civiles y el Grupo de Votantes de Mujeres de Wisconsin, han expresado su desacuerdo con la propuesta. Estas organizaciones argumentan que la enmienda podría llevar a la discriminación y disminuir los derechos de voto para todos los ciudadanos, de acuerdo con The Associated Press. En un comunicado, una coalición de grupos de derechos civiles y organizaciones comunitarias calificó la enmienda como un “intento de usurpación de poder” que podría tener consecuencias negativas para las comunidades inmigrantes.
Además, el impulso por la enmienda se produce en un clima político tenso, donde las preocupaciones sobre la seguridad electoral han sido un tema central en las campañas políticas de muchos candidatos republicanos a nivel nacional. La percepción de que existe un problema significativo relacionado con el voto de no ciudadanos ha sido impulsada por declaraciones de varios funcionarios republicanos en estados como Texas y Ohio, donde se han reportado removals de no ciudadanos de las listas de votantes, según The Associated Press.
Con la fecha de la votación acercándose, la discusión sobre esta enmienda constitucional resalta las divisiones políticas en torno al tema del voto y la inmigración en los Estados Unidos. Los resultados de esta votación no solo influirán en el futuro del proceso electoral en Wisconsin, sino que también podrían sentar un precedente para otras jurisdicciones que contemplen medidas similares.