Kamala Harris y Donald Trump invitaron este sábado a varias celebridades a su reñido duelo electoral por la presidencia de Estados Unidos, que incluyó nuevos ataques mutuos e invitaciones al voto anticipado en los estados disputados a pocos días de los comicios del 5 de noviembre.
En mítines de Detroit y Atlanta, la demócrata Harris recurrió a las figuras del pop Lizzo y Usher, respectivamente, para animar a su público, mientras tachaba a su rival Trump de agotado y desquiciado.
El ex presidente republicano, que aspira a regresar a la Casa Blanca, respondió a esas acusaciones con un discurso maratónico en Pensilvania, mientras el multimillonario Elon Musk hacía campaña a su favor en otros lugares del estado.
Ambos aspirantes están luchando en todos los frentes para conseguir el apoyo de los votantes en una carrera que, según los sondeos, está prácticamente empatada a menos de tres semanas de los comicios.
“Defendemos la idea de que la verdadera medida de la fuerza de un líder no se basa en a quién derriba, sino en a quién levanta”, dijo Harris en Detroit (Míchigan), al insistir en su promesa de invertir en las clases media y trabajadora.
Más tarde, en Atlanta (Georgia), acusó a Trump, de 78 años, de “eludir debates y cancelar entrevistas por agotamiento”.
“Cuando responde a una pregunta o habla en un mitin, ¿se han dado cuenta de que tiende a salirse del guion y a divagar, y en general, no puede terminar una idea?”, lanzó.
Trump, por su parte, comenzó su acto de más de 90 minutos en Pensilvania con un largo monólogo sobre el golfista Arnold Palmer, que da nombre al aeropuerto regional de la ciudad de Latrobe, donde compareció.
A continuación, se lanzó a su rutinario y serpenteante discurso que incluye ataques a los migrantes, denigraciones personales a Harris y la repetición de afirmaciones erróneas y sin pruebas sobre las elecciones de 2020.
El magnate trató de atraer a los votantes de clase trabajadora haciendo subir al escenario a un desfile de trabajadores del acero.
También subrayó la importancia de los delegados electorales de ese estado del noreste del país: “Si ganamos Pensilvania, ganamos todo el maldito asunto”.
“Ya es la maldita hora”
Más temprano en su mitin con Harris, la cantante Lizzo señaló: “Tanto si eres demócrata como republicano o ninguna de las dos cosas, te mereces un presidente que te escuche cuando hablas”.
“Te mereces un presidente que respete cuando protestas. Te mereces un presidente que entienda que su trabajo es ser un servidor público”, dijo la artista ganadora de varios Grammys, antes de subrayar que Harris ofrece precisamente eso.
Lizzo, que lució un traje blanco, arrancó aplausos cuando dijo que Estados Unidos estaba más que preparado para su primera mujer presidenta, haciendo alusión a un verso de uno de sus éxitos: “It’s about damn time!” (¡Ya es la maldita hora!, en español).
Una de las principales estrellas de Atlanta, Usher, dijo allí a los votantes que cuenta con ellos para que la aspiración de la vicepresidenta, que el domingo cumple 60 años, “llegue a la meta” en Georgia.
Harris ya ha recurrido a otras figuras de primer plano, desde el ex presidente Barack Obama hasta la rapera Megan Thee Stallion, desde que reemplazó a Biden como candidata demócrata en julio.
Por su parte, Musk, que respaldó a Trump en julio y es uno de los críticos más feroces de la administración del presidente Joe Biden, se ha convertido en una voz de peso en la política estadounidense desde que adquirió la red social Twitter, ahora conocida como X.
En un discurso en Harrisburg, Pensilvania, anunció que empezaría a distribuir aleatoriamente premios en efectivo -un millón de dólares cada día hasta las elecciones- a un votante registrado en el estado que firmara la petición de su organización.
Votación anticipada en marcha
Los dos candidatos están, por lo demás, pasando sus últimos días de campaña en estados donde la votación anticipada ya está en marcha.
Harris ha visto señales de que su presión para que los demócratas voten lo antes posible está surtiendo efecto.
Hasta el viernes por la noche se habían emitido casi 12 millones de votos, alrededor de un tercio de ellos en los siete estados pendulares que se espera decidan las elecciones, según datos recogidos por el Laboratorio Electoral de la Universidad de Florida.
Georgia ha batido récords, mientras que Carolina del Norte informó que el jueves pasado, primer día de la votación anticipada, habían sufragado más electores que en 2020, año en que se había registrado un aumento sustancial del voto por correspondencia debido a la pandemia.
(Con información de AFP)