El Centro Nacional de Huracanes (NHC) monitorea un área de baja presión llamada AL94, la cual podría acercarse a las Islas de Sotavento y Puerto Rico hacia el fin de semana.
Al punto: El NHC ha identificado un área de baja presión al oeste de las Islas Cabo Verde, conocida como AL94, con un 50% de probabilidad de desarrollo ciclónico en los próximos 7 días. Aunque por ahora se encuentra en un entorno desfavorable, se espera que las condiciones mejoren a medida que se desplace hacia el oeste, lo que podría llevar a la formación de una depresión tropical cerca de las Islas de Sotavento o Puerto Rico al final de la semana.
Por qué importa: El Atlántico está viendo una actividad creciente poco después del paso del huracán Milton. La trayectoria potencial de AL94 y otro sistema en el Caribe podría impactar a regiones vulnerables, incluidas Florida y Centroamérica. La formación de tormentas adicionales en el Caribe podría amenazar a Florida o moverse hacia México y Centroamérica. Los residentes en zonas costeras deben mantenerse informados de actualizaciones oficiales.
- Meteorólogos destacan que, aunque las trayectorias son inciertas, las condiciones actuales no favorecen el desarrollo de AL94.
- La oficina del Servicio Nacional de Meteorología en Tampa Bay llama a la calma y recomienda enfocarse en los esfuerzos de recuperación actuales.
- Proyecciones meteorológicas globales presentan trayectorias diversas para AL94, desde atravesar República Dominicana hasta acercarse a Florida.
Qué podría suceder:
“Un sistema de baja presión bien definido está desplazándose hacia el oeste-suroeste, más cerca de las islas Leeward, y las condiciones podrían mejorar para su desarrollo”, informó el NHC.
“No podemos precisar su trayectoria hasta ver por dónde pasa cuando llegue a las islas en aproximadamente cuatro o cinco días”, escribió Craig Setzer, meteorólogo jefe de Royal Caribbean, en un correo para el Miami Herald.
Las opiniones de los expertos locales ofrecen diferentes perspectivas sobre el potencial impacto de este fenómeno. Denis Phillips, un meteorólogo respetado, restó importancia a la amenaza que este podría representar.
“Estamos a mediados de octubre. Los huracanes en el Atlántico tienden a encontrarse con un frente y desviarse hacia el norte. No digo que nunca ocurra, pero a menos que sea una tormenta del Caribe occidental, la amenaza para nuestra área es increíblemente baja. No estoy preocupado”, manifestó al Tampa Bay Times.
Autoridades piden estar atentos
Desde la oficina del Servicio Nacional de Meteorología en Tampa Bay se instó a la calma mediante un mensaje en redes sociales: “No es momento de entrar en pánico por esta área sombreada de color naranja. Aún es muy temprano para determinar hacia dónde irá o cuán fuerte será, si es que se desarrolla. Concentrémonos en hoy y en los esfuerzos de recuperación”.
El Miami Herald señaló que los modelos meteorológicos globales presentan diferentes proyecciones para la trayectoria del sistema. Algunas predicciones sugieren que podría moverse hacia el oeste, atravesando República Dominicana y Cuba, mientras que otras sugieren un ligero desplazamiento hacia el norte, acercándose a Florida y las Bahamas, o alejándose completamente de tierra.
El sistema también ha sido analizado por expertos en meteorología debido a su ubicación actual en una zona de aire seco, lo cual no es ideal para el desarrollo de tormentas. Aun así, el NHC es optimista sobre la posibilidad de que se fortalezca a medida que avance hacia áreas con condiciones más favorables.
En resumen, aunque actualmente no hay necesidad de preocuparse por el impacto inmediato de este sistema en Florida, dadas las diferentes trayectorias posibles y etapas tempranas de desarrollo, los meteorólogos instan al público a mantenerse informado y preparado. “Es importante seguir atentos a las actualizaciones de los pronosticadores y prepararse para cualquier eventualidad”, dijo Setzer al Miami Herald.