El huracán Milton ha recuperado su clasificación como categoría 5, con vientos sostenidos de 265 km/h (165 mph), lo que lo convierte en uno de los ciclones más poderosos de la temporada. Según el último informe del Centro Nacional de Huracanes (NHC), la tormenta se está moviendo hacia el este-noreste y se espera que impacte en la costa de Florida durante las próximas horas. Aunque el núcleo del huracán tocará tierra más al norte de Miami-Dade, las autoridades en todo el estado, incluidas las del sur de Florida, se están preparando intensamente para los efectos indirectos de este poderoso sistema.
En una entrevista con Fox Weather, la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, explicó las medidas que se han puesto en marcha para mitigar los posibles impactos y proteger a la población.
Preparativos en Miami-Dade ante la llegada de Milton
A pesar de que el impacto más fuerte de Milton se espera en otras partes de la península, en Miami-Dade se han tomado precauciones significativas para asegurar que la región esté lista para enfrentar cualquier eventualidad. Levine Cava señaló que, desde hace varios días, se ha trabajado de manera continua para “proteger el sistema de drenaje de tormentas, preparar bolsas de arena y poner en alerta al personal de gestión de emergencias”. Estas medidas incluyen la instalación de refugios para residentes de parques de casas móviles, quienes podrían estar más expuestos a los efectos de los fuertes vientos.
Además, mencionó que uno de los puntos cruciales de la preparación ha sido el descenso del nivel del agua en los canales, una estrategia preventiva para evitar inundaciones en caso de lluvias intensas. Levine Cava enfatizó que la clave es que todos los residentes del condado tomen medidas de preparación personal, desde asegurar sus hogares hasta tener listos suministros esenciales.
Afluencia de evacuados hacia Miami-Dade
Con el centro del huracán previsto para pasar por la parte central de Florida, se espera que muchas personas evacuadas de áreas más afectadas se desplacen hacia el sur del estado, incluyendo Miami-Dade. La alcaldesa comentó que ya se están viendo movimientos hacia la región y que se ha estado coordinando con los hoteles para asegurarse de que no suban excesivamente los precios debido al aumento en la demanda. “Queremos ser hospitalarios con aquellos que están buscando refugio aquí”, dijo Levine Cava, haciendo un llamado a evitar la especulación de precios durante la emergencia.
Este esfuerzo también incluye conversaciones con autoridades locales y del estado para garantizar que los evacuados reciban apoyo en su llegada. A pesar de que Miami-Dade no estará en el epicentro de la tormenta, las autoridades mantienen el compromiso de proporcionar refugio y asistencia a quienes se ven obligados a dejar sus hogares.
Coordinación a nivel estatal y lecciones de huracanes anteriores
Miami-Dade ha ganado una reputación de ser una de las regiones mejor preparadas para desastres naturales, en parte debido a las duras lecciones aprendidas tras el devastador huracán Andrew en 1992. Levine Cava destacó que Andrew provocó cambios drásticos en los códigos de construcción, convirtiendo a la región en una de las áreas con los estándares más seguros del país. “Tenemos el código de construcción más seguro de la nación”, afirmó.
Además, mencionó que existe una coordinación constante entre múltiples departamentos y agencias locales, incluyendo las 34 ciudades que conforman el condado. Esta comunicación también se extiende al estado de Florida y su Departamento de Gestión de Emergencias, que ha brindado un apoyo fundamental. Las llamadas diarias con los sistemas escolares, los hospitales y las principales instituciones garantizan que todas las partes estén preparadas y alineadas en sus esfuerzos de mitigación.
Levine Cava subrayó que, a pesar de la distancia entre Miami y la trayectoria principal del huracán, es crucial que la gente siga las recomendaciones de seguridad y mantenga la calma durante los próximos días. “Mientras escuchen la información, deberían poder enfrentar esta tormenta”, concluyó.
La llegada de Milton, aunque más centrada en el norte de la península, ha puesto en alerta a todo el estado de Florida. En Miami-Dade, las lecciones del pasado han permitido una respuesta organizada y coordinada. Con refugios preparados, medidas preventivas en marcha y una comunicación constante entre las agencias locales y estatales, las autoridades buscan minimizar el impacto en la población. Sin embargo, la expansión del campo de viento y los riesgos de marejadas ciclónicas mantienen a todos vigilantes mientras se espera el desenlace de este poderoso huracán.