La Fiscalía del Condado de Los Ángeles decidió contemplar las nuevas pruebas en el caso de los hermanos Menendez, uno de los más notorios de los años 80. Los hermanos Erik y Lyle, sentenciados a cadena perpetua por el asesinato de sus padres, José y Kitty, ocurrido en 1989, podrían ver una modificación en su condena, una decisión que sería anunciada durante la audiencia programada para noviembre de 2024.
Qué implica la revisión de su sentencia
La decisión del fiscal George Cascón surgió tras la presentación de elementos que, según sus abogados, podrían evidenciar un cambio en la percepción de los hechos ocurridos. Un documento clave incluye una carta, presuntamente escrita por Erik Menéndez, en la que se menciona haber sido agredido sexualmente por su padre.
Según declaró Gascón en una conferencia de prensa, “el tema del abuso sexual habría sido tratado con más sensibilidad si el caso hubiese ocurrido hoy”. La nueva evidencia presentada se diferencia de las pruebas evaluadas en el juicio inicial, y podría indicar un marco diferente de maltrato y violencia aún no reconocido por el sistema judicial de aquel entonces.
A pesar de la contundencia de las nuevas presentaciones, Gascón puntualizó que “no se ha decidido un desenlace”, y que su oficina sigue en fase de análisis. Este nuevo panorama deja abierta la posibilidad de un cambio de la sentencia actual (cadena perpetua), incluso podría dar lugar a un nuevo juicio.
Los hermanos habrían confesado el asesinato, pero alegaron en su defensa que actuaron por temor debido al abuso prolongado de su padre. La fiscalía argumentó en el proceso inicial que no había evidencia sustancial de dicho abuso y que los asesinatos fueron motivados por interés en la herencia de sus padres.
George Gascón, fiscal del condado, explicó que su oficina todavía debe evaluar la validez completa de lo presentado en el juicio. “Estamos revisando información”, afirmó durante el encuentro con la prensa. Además, mencionó que busca la reelección en su cargo, relevando que durante su mandato se han resuelto más de trescientas reasignaciones de sentencia, de las cuales solo un pequeño porcentaje reincidió.
¿Los hermanos Menéndez podrían ser liberados?
CNN señaló que el caso resuena en el sistema judicial debido a que la ley californiana permite evaluar si los convictos han sido rehabilitados. Si la corte concluye que Erik y Lyle han cumplido su condena de modo ejemplar, podría abrir una puerta para su libertad. Lyle tenía 21 años, y Erik 19 al momento de los crímenes, y han pasado más de tres décadas encarcelados.
En tanto, la obtención de nuevas pruebas y este interés por reevaluar el caso han capturado la atención pública, además de avivarse por la reciente producción en Netflix, Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story.
Sobre la mencionada serie, Erik Menéndez habría criticado el programa, calificándolo de “representación deshonesta” de los acontecimientos, una opinión que fue apoyada por diversos seguidores del show que conocían del caso.
Por otro lado, el abogado Cliff Gardner, en representación de los hermanos, expresó su satisfacción con respecto a la decisión de Gascón de revisar el caso. El defensor legal señaló a The Associated Press que, dado el entendimiento actual de cómo el abuso sexual afecta a los niños de ambos sexos, considera que “una nueva sentencia es el resultado apropiado”.
Sin embargo, NBC News reportó que el Departamento de Policía de Beverly Hills, la agencia investigadora original, no ha sido contactada hasta el momento por la fiscalía respecto a estos nuevos desarrollos. Este aspecto plantea interrogantes sobre la coordinación entre las autoridades a medida que se avanza en el proceso.
A medida que el 29 de noviembre se aproxima, fecha en que se ha programado la audiencia, las dudas sobre el futuro de los hermanos Menéndez se mantienen latentes. Cualquiera que sea el desenlace, este caso emblemático sigue reflejando el debate en torno a la justicia, el abuso y cómo las percepciones legales han evolucionado con el tiempo.