El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) identificó dos nuevos ciclones tropicales en el Atlántico que están ganando fuerza, según informó NBC News. Estos fenómenos, el Huracán Kirk y la Tormenta Tropical Leslie, no representan una amenaza directa para las zonas habitadas en este momento, pero podrían intensificar las lluvias en áreas ya afectadas por el reciente paso del devastador Huracán Helene.
Kirk fue clasificado como huracán el martes 1 de octubre por la noche y ya alcanzó la categoría 3. Se espera que continúe fortaleciendo en los próximos días, con la posibilidad de llegar a categoría 4 mientras se desplaza hacia el noroeste sobre el Atlántico central.
Actualmente, Kirk presenta vientos sostenidos de 200 kilómetros por hora y una presión central mínima de 948 milibares. Su ubicación se encuentra a 1.900 kilómetros al este de las Islas de Sotavento. El NHC advierte que las Islas de Sotavento, Bermudas, las Antillas Mayores y la costa este de Estados Unidos podrían experimentar condiciones peligrosas de oleaje y corrientes de resaca debido a las marejadas generadas por Kirk, según publicó CBS News.
Por otro lado, Leslie alcanzó el estatus de tormenta tropical el miércoles 2 de octubre por la noche y se prevé que continúe su movimiento lento hacia el oeste hasta el jueves por la noche, seguido de un desplazamiento más rápido hacia el oeste-noroeste durante el fin de semana.
Leslie, con vientos sostenidos de 72 kilómetros por hora y una presión central mínima de 1002 milibares, podría convertirse en huracán en los próximos días. Actualmente, se encuentra a 828 kilómetros al suroeste de las Islas de Cabo Verde y se espera que las marejadas lleguen a las Islas de Sotavento el viernes, y a Bermudas y las Antillas Mayores el sábado. No hay alertas o advertencias costeras vigentes en este momento.
Además, el NHC señaló un área de interés en el Golfo de México, donde se espera que un sistema de lluvias y tormentas eléctricas se mueva lentamente, lo que podría provocar precipitaciones significativas en la costa del Golfo y la península de Florida. Sin embargo, no se anticipa que estas lluvias afecten a las regiones de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Georgia, que sufrieron severos daños por el huracán Helene.
Estos fenómenos meteorológicos se desarrollan mientras muchas personas en el sureste de Estados Unidos aún carecen de agua potable, servicio de telefonía móvil y electricidad tras el paso del Huracán Helene, que ha sido uno de los más mortíferos en la historia del país.
Helene deja una trágica cifra de muertes en el sureste de Estados Unidos, con un saldo de al menos 200 personas fallecidas, según datos publicados por The Associated Press. Todavía hay personas desaparecidas y las labores de búsqueda continúan en las áreas más afectadas.
Entre tanto, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, visitó este jueves por segundo día consecutivo las zonas devastadas por las catastróficas inundaciones y vientos que dejó Helene y a las que el mandatario ordenó el envío de 1.000 soldados para ayudar con las tareas de recuperación.
Biden llegó el jueves 3 de octubre a Florida, donde recorrerá áreas arrasadas por el huracán tras la ronda que hizo el miércoles por las Carolinas, según reportó la agencia EFE.
El mandatario, que no se reunirá con el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, visitó primero Tallahassee, la capital de ese estado, para luego hacer un sobrevuelo por las áreas por donde tocó tierra Helene, en las inmediaciones de Perry, en el noroeste floridano.