Los candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos, J.D. Vance y Tim Walz, se enfrentaron este martes en un debate televisado, centrado en temas como el aborto y la migración, pero que terminó girando en torno a un único protagonista: Donald Trump. El nombre del ex presidente surgió más de 80 veces durante el intercambio, el doble que en el primer debate entre los candidatos presidenciales que tuvo lugar en septiembre.
Vance, senador republicano de Ohio, y Walz, gobernador demócrata de Minnesota, profundizaron en las políticas de manera más detallada en comparación con el debate presidencial. Sin embargo, la sombra de Trump dominó la discusión, con Walz atacando reiteradamente al ex presidente y Vance defendiéndolo.
“Al estar del lado de Donald Trump y no trabajar juntos para encontrar una solución, la migración se convierte en un tema de debate político”, afirmó Walz, en referencia a las tensiones en Springfield, Ohio, por la llegada de migrantes haitianos.
“Y cuando se convierte en un tema de debate como este, deshumanizamos y vilipendiamos a otras personas”, añadió durante la transmisión de CBS.
El aborto fue otro de los puntos de mayor confrontación, especialmente tras la decisión de la Corte Suprema de revertir el derecho nacional al aborto en 2022, con una mayoría de jueces nominados por Trump.
Vance acusó a los demócratas de tener una postura “muy radical a favor del aborto” y apoyar leyes que calificó como “bárbaras”. Walz respondió diciendo que se posicionaba como “pro-mujeres”, en contraste con las políticas restrictivas apoyadas por su rival.
El conflicto en el Medio Oriente también fue tema de debate. Desde el inicio, ambos contendientes se refirieron al reciente ataque con misiles de Irán contra Israel.
Walz aprovechó la ocasión para criticar la política exterior de Trump, señalando su “giro hacia Rusia” y su decisión de retirar a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán de 2015.
“Por mucho que el gobernador Walz acuse a Donald Trump de ser un agente del caos, Trump en realidad trajo estabilidad al mundo”, replicó Vance.
Walz, sin embargo, enfrentó momentos incómodos cuando se vio obligado a reconocer que había “cometido un error” al afirmar que estuvo presente en Hong Kong durante las protestas de la Plaza de Tiananmén en 1989.
El debate se presenta en un contexto político singular, ya que Harris ha intervenido en la campaña de manera inusualmente activa, dado el avance del ciclo electoral. Es probable que este sea el último debate vicepresidencial de la campaña de 2024, debido a que Trump se ha negado a participar en un segundo encuentro con Harris.
El evento también sirvió como una oportunidad para que los estadounidenses conocieran a los dos hombres que podrían estar a un paso de la presidencia.
Ambos candidatos tienen trayectorias que resuenan con la clase trabajadora. Vance es autor del libro autobiográfico sobre la región del “Rust Belt”, “Hillbilly Elegy”, mientras que Walz se presenta como un ex maestro y entrenador de fútbol, conocido por su estilo campechano.
Durante el debate, Vance se mostró combativo, alineado con el estilo confrontativo de Trump. En cambio, Walz intentó marcar distancias con un discurso progresista, describiendo a su oponente y al ex presidente como “extraños”.
En la antesala del evento, Biden brindó su apoyo a Walz con un mensaje en la red social X, en el que escribió: “Coach, te respaldo esta noche”.
Trump, que se encontraba en Wisconsin en el momento del debate, centró sus declaraciones en la crisis en Oriente Medio, insistiendo en que “si yo estuviera a cargo, el ataque de hoy a Israel nunca habría sucedido”. Además, aconsejó a Vance que se divirtiera, elogiándolo como un “guerrero” y un fuerte defensor de sus políticas.
El choque entre ambos candidatos tuvo lugar en un momento en el que varios estados aún están lidiando con las secuelas de la tormenta Helene, que ha dejado al menos 150 muertos y afectado a miles de personas.
(Con información de AFP)