Las tarifas de estacionamiento en South Beach están por sufrir un aumento significativo a partir del próximo 1 de octubre. Según información del Miami Herald, el costo del estacionamiento en las calles subirá de 4 a 6 dólares por hora para los no residentes de la ciudad. Mientras tanto, para los ciudadanos que se registren para recibir el descuento, la tarifa pasará de 1 a 2 dólares por hora. Esta es la primera vez que Miami Beach impone aumentos en las tarifas de estacionamiento desde 2015.
Entre los otros ajustes que entrarán en vigor, destacó que el costo del estacionamiento en lotes superficiales, incluyendo el distrito de entretenimiento de South Beach, incrementará de 2 a 3 dólares por hora. También las tarifas de los garajes subirán de 2 a 3 dólares por hora hasta cuatro horas.
El estacionamiento en la calle en el lado este de Mid-Beach pasará de 3 a 4 dólares por hora, mientras que en North Beach todas las tarifas aumentarán de 1 a 2 dólares. En las zonas residenciales, los permisos de 24 horas para visitantes subirán de 3 a 4 dólares.
Eric Carpenter, directivo de la ciudad, informó al Mayor Steven Meiner y a la Comisión Ciudadana de estos cambios en un memo fechado el 13 de septiembre, señalando que una ordenanza de 2019 otorgaba al gerente la autoridad para ajustar las tarifas de estacionamiento cada cinco años basado en el Índice de Precios al Consumidor (CPI), una medida de la inflación.
El comisionado Alex Fernandez expresó su desacuerdo a través de un mensaje de texto al Miami Herald, afirmando que propondrá “revertir” estos aumentos antes de que entren en vigor. “Estos aumentos en las tarifas de estacionamiento colocan una carga innecesaria en el público, especialmente en un momento en que muchos ya enfrentan desafíos financieros”, manifestó.
Asimismo, el comisionado Joseph Magazine mencionó en una publicación en redes sociales que llevará un artículo legislativo a una reunión en octubre para “revertir el aumento de tarifas y aliviar esta carga sobre nuestros residentes”.
En 2015, las tasas de los parquímetros en las calles de South Beach subieron de 1.75 a 4 dólares la hora, mientras que las tarifas en los lotes superficiales y garajes tuvieron aumentos menores. En ese momento, los funcionarios de la ciudad aseguraron que el objetivo no era aumentar los ingresos, sino reducir la congestión del tráfico, incentivando a los conductores a utilizar garajes y lotes superficiales en vez de circundar buscando estacionamiento en la calle.
La reacción pública ante este incremento ha sido inmediata y crítica. En una publicación de Facebook que detallaba los cambios, decenas de residentes expresaron su descontento en los comentarios. “En lugar de exprimir a residentes y visitantes con estos aumentos desmesurados”, escribió un usuario. “El foco debería estar en reducir costos para incentivar a más personas a venir, apoyar a los pocos negocios que aún intentan sobrevivir y ayudar a revivir la playa”, agregó otro.
De acuerdo con NBC News, los residentes de Miami Beach no se librarán de estos aumentos. La tarifa de 1 dólar la hora para los inscritos en el Programa de Descuento para Residentes duplicará a 2 dólares para espacios en la calle, garajes y lotes superficiales. Además, estos residentes tendrán que pagar una tarifa plana diaria de 8 dólares en el estacionamiento municipal frente a la playa en la 46 Street y Collins Avenue, comparado con los 6 dólares actuales.
El aumento de tarifas de estacionamiento en Miami-Dade ha sido un tema constante para sus residentes, marcados por incrementos anuales que contrastan claramente con ciudades que ofrecen estacionamiento gratuito en calles de todo el mundo.
Según NBC6, en 2018 las tarifas horarias en Little River aumentaron de 1.75 a 2.50 dólares, mientras que en Wynwood alcanzaron el aumento más pronunciado, de 1.25 a 3 dólares por hora. Avanzando a 2024, las tasas en Wynwood han ascendido a 3.40 dólares por hora y 6.65 dólares por dos horas. En contraste, Time Out reportó que en 2018 la tarifa horaria de Bayfront Park era de 3.50 dólares, pero para 2024, se había disparado a 10.
Para una ciudad como Miami-Dade, con una población densa, clima caluroso y grandes distancias, la necesidad de vehículos personales es más apremiante. Con el transporte público clasificado en el puesto 52 de 100 ciudades, muchos dependen en gran medida de sus automóviles.