Mientras muchas cosas no parecen funcionar con fluidez en Chicago, el río bautizado con el mismo nombre de esta ciudad, ofrece una vía única y sorprendente para un valiente viajero.
Dan Schreiner, un residente de Roscoe Village, opta por un método de transporte nada convencional para llegar al centro de la ciudad: un kayak, en lugar del concurrido Kennedy Expressway. Como él mismo comentó a CBS News, “No hay tráfico en el río”.
Schreiner realiza esta ruta en kayak varias mañanas al mes desde que comenzó como parte de una resolución de Año Nuevo. “Dar algo a cambio a la Madre Tierra sin emisiones y tratar de inspirar a algunas personas a ser saludables”, dijo Schreiner a CBS News. A pesar de que inicialmente le parecía una “idea descabellada”, su esposa lo motivó a seguir adelante.
No es la primera vez que Dan emprende una hazaña atlética considerable. Según contó a CBS News, “en 2017, recorrió más de 1600 kilómetros en dos semanas para ganar un concurso de ciclismo de invierno”. Él mismo señaló que “básicamente es como conducir tu bicicleta a Milwaukee todas las noches después del trabajo”.
A pesar de que su travesía por el río Chicago no es sencilla, Schreiner aprecia la tranquilidad y la ausencia de embotellamientos característicos del tráfico urbano. Al llegar cerca de Wacker Drive, el panorama cambia un poco con algo de tráfico acuático, pero sigue siendo un viaje mucho más placentero que el de la congestión de la Kennedy Expressway.
El viaje en kayak de Schreiner, dependiendo del calor del día, puede llevarle alrededor de tres horas. Al llegar a su destino, solo debe meter su kayak en una mochila y seguir su camino hacia el trabajo.
El tráfico en Chicago enfrenta numerosas complicaciones debido a su red vial compleja y al alto volumen de vehículos. La ciudad, con sus calles diseñadas en un patrón de cuadrícula, a menudo se congestiona debido a la combinación de tráfico local y de tránsito.
Las intersecciones importantes, como las cercanas al Loop, experimentan embotellamientos frecuentes durante las horas pico, exacerbados por la proximidad de importantes centros de negocios y atracciones turísticas. Además, la infraestructura vial, en algunos casos envejecida, a menudo no se adapta adecuadamente al creciente número de vehículos y a las necesidades del transporte público.
Las obras de construcción y las reparaciones en carreteras son otro factor significativo en el tráfico de Chicago. La ciudad está en constante renovación, y las interrupciones debidas a la reconstrucción de puentes, túneles y calles pueden causar desvíos imprevistos y ralentizar el flujo de tráfico.