La compañía Radian Aerospace, con sede en Seattle, está apostando por un concepto innovador y ambicioso: la construcción de un avión espacial completamente reutilizable. La idea no es nueva, surge de un proyecto de la NASA en la década de 1990 llamado X-33, que fue descartado en 2001 debido a problemas técnicos.
“Lideré el programa X-33 y decidimos no continuar porque nuestra evaluación mostró que costaría más de lo esperado y estábamos al borde de nuestra capacidad tecnológica”, dijo Livingston Holder, exingeniero aeroespacial de la USAF y ahora CTO de Radian Aerospace, en declaraciones a CNN.
Holder, que también fue el gerente del programa X-33, cree que ahora, con materiales compuestos más ligeros y resistentes, y sistemas de propulsión más eficientes, el sueño del vuelo SSTO (Single Stage to Orbit) es viable.
“Tenemos materiales compuestos que son más ligeros, más resistentes y pueden soportar un rango térmico mayor que antes”, declaró el experto. El Radian One, el nuevo avión espacial, busca renunciar a los lanzamientos verticales tradicionales y utilizar un sistema innovador: un trineo propulsado por cohetes.
Jeffrey Hoffman, profesor del MIT y antiguo astronauta de NASA, explicó a CNN que alcanzar la órbita terrestre requiere velocidades de aproximadamente 28.000 km/h. “El problema es que, a medida que asciendes, no solo debes levantar el cohete y la carga útil, sino también todo el combustible”, aclaró Hoffman.
Esta limitación es conocida como “la tiranía de la ecuación del cohete”, un desafío que radica en la necesidad de transportar una gran cantidad de combustible. Para abordar esto, el sistema propuesto por Radian utiliza un trineo propulsado que corre a lo largo de un riel de tres kilómetros, acelerando hasta 864 km/h antes de liberar el avión espacial para su vuelo autónomo.
Hoffman también mencionó a CNN que “lo que Radian está haciendo con su trineo propulsado es similar a la idea del motor scramjet”. Esta tecnología intenta obtener la aceleración inicial sin utilizar el propelente del cohete, lo que permite superar algunas de las limitaciones de la ecuación del cohete.
Radian Aerospace ha recaudado cerca de 28 millones de dólares para desarrollar el Radian One, que se probará en un modelo a escala este año, según información de Business Insider. El avión espacial está diseñado para ser reutilizable hasta cien veces, transportando una tripulación de dos a cinco astronautas con un tiempo de reposición de 48 horas entre misiones.
El interés en los aviones espaciales se justifica por la creciente demanda de lanzamientos al espacio, especialmente para satélites que facilitan servicios como la previsión meteorológica y el GPS. “Los cohetes siguen siendo la mejor opción, aunque son ‘terriblemente ineficientes y caros’”, según la NASA citada por Business Insider.
El Radian One está diseñado para realizar diversas misiones, desde desplegar satélites hasta realizar observaciones terrestres o misiones de inteligencia y defensa. Holder explicó a CNN que el avión podría ayudar en áreas de desastre, entregando suministros cuando las pistas de aterrizaje están inutilizadas.
Aunque el Radian One no reemplazará a los cohetes tradicionales para cargas más pesadas, “habrá siempre un lugar para los lanzamientos verticales”, según Holder, quien lo compara con un camión grande frente a una camioneta más pequeña y versátil, capaz de transportar carga ligera y personal.
Los ojos del mundo estarán puestos en los resultados de las pruebas que Radian Aerospace tiene previstas para su avión espacial. Si la empresa logra su objetivo, no solo marcará un hito técnico, sino también potencialmente una economía competitiva en los lanzamientos espaciales.