Las lluvias intensas que golpearon la costa de California provocaron graves deslizamientos y cortes de energía

La inestabilidad de este terreno ha sido una preocupación durante décadas. Recientes deslaves obligaron a las autoridades a sugerir evacuaciones preventivas en uno de sus más importantes barrios

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El barrio Portuguese Bend en
El barrio Portuguese Bend en Rancho Palos Verdes enfrenta una crisis por deslizamientos de tierra (REUTERS/David Swanson)

La comunidad de Rancho Palos Verdes en el sur de California, famosa por sus lujosas propiedades y sus impresionantes vistas al océano Pacífico, enfrenta una crisis creciente debido a los deslizamientos de tierra en el barrio de Portuguese Bend, por lo que Southern California Edison decidió cortar el suministro eléctrico a unos 140 hogares en las últimas, según informó NBC News.

Esta medida fue tomada después de que un deslizamiento de tierras la semana anterior provocara la caída de una línea eléctrica, originando un incendio menor.

“El movimiento de tierra en Portuguese Bend ha creado una situación tan peligrosa que hemos tomado la difícil decisión de desconectar el suministro eléctrico de manera indefinida para prevenir incendios”, explicó Larry Chung, vicepresidente de compromiso con los clientes de Southern California Edison, durante una conferencia de prensa citada por ABC News.

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Southern California Edison cortó el suministro eléctrico a 140 hogares tras un deslizamiento (REUTERS/David Swanson)

Las autoridades de Rancho Palos Verdes, una ciudad de 42.000 habitantes ubicada a unos 40 kilómetros al sur de Los Ángeles, emitieron advertencias de evacuación y cerraron el suministro de gas en la zona. Ante la urgencia, se estableció un centro de asistencia emergente para ayudar a los residentes afectados, proporcionando servicios como carga de teléfonos móviles y apoyo en la reubicación.

Esta es una crisis en constante evolución y debemos estar preparados”, subrayó Ara Mihranian, el administrador de la ciudad, durante la conferencia de prensa el domingo 01 de septiembre.

Aunque las evacuaciones no son obligatorias por el momento, se pidió a los residentes que permanezcan en sus hogares que limiten el uso de agua y saneamiento durante la noche, ya que los generadores que mantienen operativa la red de alcantarillado pueden apagarse temporalmente.

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Los deslizamientos han forzado el cierre de suministro de gas en varias áreas (REUTERS/David Swanson)

Los residentes, sin embargo, han mostrado frustración por haber recibido solo 24 horas de aviso antes del corte de energía, lo que les obligó a encontrar rápidamente alternativas de vivienda y equipos necesarios para vivir sin servicios básicos. “Acabo de comprar una cocina de inducción para lidiar con la falta de gas, y ahora ni siquiera puedo usar eso”, expresó Craig Cadwallader a NBC Los Angeles el domingo.

Durante la conferencia de prensa de ayer, la supervisora del condado de Los Ángeles Janice Hahn hizo un llamado al estado para que brinde apoyo y pidió al gobernador Gavin Newsom que visite la zona. “Esto es más grande que Rancho Palos Verdes”, afirmó Hahn. “El movimiento de tierras es tan gigantesco y tan dañino que una sola ciudad no debería tener que soportar la carga sola”.

Una crisis cada vez más grave

Los deslizamientos de tierra en Rancho Palos Verdes no son un fenómeno nuevo. El terreno sobre los acantilados de la península de Palos Verdes, hogar de costosas propiedades y sitios emblemáticos como el Trump National Golf Club Los Angeles, ha estado moviéndose desde la década de 1950. Actualmente, los geólogos reportan que el terreno se desplaza a un ritmo de más de 30 centímetros por semana en algunas áreas, amenazando varios barrios.

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Las autoridades emitieron advertencias de evacuación y ordenaron cierres preventivos (REUTERS/David Swanson)

El cierre del suministro de gas el mes pasado fue la respuesta a un “significativo nuevo movimiento de tierras” que estaba sometiendo una tensión considerable sobre la infraestructura, según explicó Ramzi Awwad, director de obras públicas de la ciudad, en una reciente reunión del consejo.

El aumento en las lluvias intensas durante los últimos dos años ha agravado el problema de los deslizamientos a lo largo de la costa de California, con las colinas saturadas de agua. El cambio climático también ha intensificado las tasas de precipitaciones en todo el país, exacerbando situaciones de riesgo como esta.

El alcalde John Cruikshank comentó el mes pasado que la ciudad llevaría a cabo inspecciones voluntarias de las viviendas afectadas, en lugar de etiquetar forzosamente las residencias para indicar su habitabilidad. “También estamos trabajando con las compañías de servicios públicos para mantener el suministro de todos los servicios y restaurar el gas una vez que la tasa de deslizamiento sea más manejable”, declaró a NBC Los Angeles.

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