La gran mayoría de los estadounidenses aún aspira a los elementos tradicionales del sueño americano, como adquirir una casa, formar una familia y tener una jubilación cómoda, según revelan datos recientes. Sin embargo, una encuesta de The Wall Street Journal/NORC realizada en julio de este año sugiere que muchas personas sienten que estas metas están fuera de su alcance.
A pesar de que el 89% de los encuestados señaló que poseer una casa es esencial o importante para su visión del futuro, únicamente el 10% considera que es fácil lograrlo. De manera similar, el 96% y el 95% de los entrevistados calificaron la seguridad financiera y una jubilación cómoda como esenciales o importantes, pero solo el 9% y el 8%, respectivamente, creen que estas metas son alcanzables con facilidad.
El descontento con la viabilidad del “sueño americano” es más pronunciado entre las generaciones más jóvenes, quienes enfrentan mayores desafíos económicos, como los altos costos de vivienda, tasas de interés elevadas y deudas estudiantiles.
Por otro lado, la tendencia de disminución de la movilidad económica ha agravado la situación. Mientras que alrededor del 90% de los niños nacidos en la década de 1940 superaron económicamente a sus padres, solo el 50% de los nacidos en la década de 1980 pueden decir lo mismo, según una investigación de Nathaniel Hendren del MIT y Raj Chetty de Harvard.
“Es un tiro al aire si superas o no a tus padres en términos de ingresos”, comentó el profesor de economía del Instituto Tecnológico de Massachusetts Nathaniel Hendren, quien también observó un leve incremento en los salarios de los estadounidenses de menores ingresos después de la pandemia.
Marquell Washington, Un joven de 22 años, relató su experiencia decepcionante a The Wall Street Jpurnal (WSJ): “no te dicen lo difícil que es alcanzar el sueño americano, tienes que aprenderlo por tu cuenta”.
Washington creció en un barrio difícil de Chicago, y aunque fue el primero en su familia en ir a la universidad, tuvo que abandonarla debido a la violencia que cobró la vida de tres de sus amigos cercanos. Ahora trabaja a tiempo parcial en una organización de desarrollo juvenil, ganando alrededor de 30,000 dólares al año.
Otro caso particular de esfuerzo por mantener la estabilidad financiera es el de Richard Thomas y Cherish Celetti. La pareja compró una casa de cinco habitaciones en Mount Vernon, Nueva York, en 2017, creyendo que habían alcanzado su propia versión del sueño americano.
Sin embargo, el aumento repentino en los costos de energía y otros servicios ha puesto en riesgo su estabilidad económica, según contaron al WSJ. Han tenido que reducir sus aportes para la jubilación, cancelar vacaciones y ajustar el termostato para poder cumplir con los pagos.
El aumento en los costos de vida también afecta a quienes desean iniciar una familia o casarse. Kevin Murphy, de 31 años, resaltó lo complicado que se ha vuelto encontrar pareja debido a los costos asociados con las citas. “Para mí, el sueño americano parece más lejano que nunca”, afirmó Murphy, quien gana 95,000 dólares al año pero aún se siente inadecuado comparado con quienes ganan más o poseen una casa.
En términos de ocupación de viviendas, un estudio de CBRE indicó que poseer una casa es un 47% más caro que alquilar, un desafío adicional para aquellas personas que buscan cumplir con el sueño de la adquisición de un hogar.
Aunque algunas medidas internacionales sugieren que la situación económica puede estar mejorando lentamente, todavía son numerosos los desafíos que enfrentan los estadounidenses en su búsqueda de estabilidad financiera y personal.
Los expertos coinciden en que cambios drásticos en aspectos económicos clave, como las pensiones del sector privado y los costos de vivienda, han transformado las perspectivas sobre el sueño americano.