El aumento en la cantidad de migrantes que cruzan ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y Canadá llevó al gobierno de Joe Biden a adoptar nuevas medidas para acelerar los procesos de asilo, según documentos internos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) obtenidos por CBS News.
De acuerdo con el medio, se implementarán dos cambios principales para gestionar el asilo bajo el acuerdo de País Seguro Tercero con Canadá, un pacto firmado inicialmente en 2002 y ampliado el año pasado. Este acuerdo permite a las autoridades estadounidenses y canadienses devolver solicitantes de asilo al otro lado de la frontera, basándose en que ambos países son seguros para pedir refugio.
Una de las modificaciones requerirá que los migrantes tengan listos sus documentos cuando los oficiales de asilo de Estados Unidos realicen las evaluaciones para determinar si están sujetos al acuerdo con Canadá.
Hasta ahora, los migrantes podían retrasar estas evaluaciones para reunir los documentos necesarios que podrían eximirlos del acuerdo. Ciertos grupos, como menores no acompañados y aquellos con familiares en Estados Unidos, no están sujetos a este acuerdo.
El segundo cambio reducirá el tiempo que los migrantes tienen para consultar con abogados antes de sus evaluaciones con los oficiales de asilo de Estados Unidos, de un mínimo de 24 horas a solo cuatro horas. Este ajuste iguala un cambio similar hecho en la frontera con México en junio de este año, relacionado con la medida del presidente Biden de restringir severamente el asilo en esa zona.
Aquellos migrantes sujetos al acuerdo de País Seguro Tercero no pueden pedir asilo en Estados Unidos y pueden ser devueltos a Canadá. Quienes califiquen para una exención pueden solicitar asilo en el país. De manera recíproca, Canadá puede devolver a EE.UU. a los que crucen desde allí y estén sujetos al acuerdo.
Estas políticas entrarán en vigor el miércoles 14 de agosto, según los documentos del DHS. En una declaración a CBS News, el DHS confirmó las acciones, agregando que continúa “imponiendo consecuencias severas para los no ciudadanos que no tienen una base legal para permanecer en Estados Unidos”.
El Departamento también aseguró haber revisado cuidadosamente la implementación del acuerdo de País Seguro Tercero con Canadá y concluyó que se podía agilizar el proceso en la frontera sin afectar el acceso de los no ciudadanos a un procedimiento completo y justo para determinar su derecho al asilo o protección temporal equivalente.
Estos cambios vienen en respuesta a un incremento sin precedentes en los cruces ilegales de la frontera norte. En el año fiscal 2024, los agentes de la Patrulla Fronteriza han detenido a 16,500 migrantes que cruzaron la frontera Estados Unidos - Canadá ilegalmente, un aumento significativo comparado con los 10,000 del año pasado y los 2,200 de 2022.
A pesar de que los cruces en la frontera norte son menores en comparación con la sur, donde en el año fiscal 2024 se han registrado 1.3 millones de aprehensiones, el incremento en la frontera con Canadá ha planteado grandes desafíos para los oficiales estadounidenses.
La Patrulla Fronteriza dispone de menos agentes y recursos para vigilar la extensa frontera con Canadá, que cuenta con terrenos difíciles como bosques densos y áreas montañosas.
El 75% de las detenciones en la frontera norte este año se han llevado a cabo en el sector de Swanton, que incluye partes rurales de New York, New Hampshire y Vermont, con cifras que superan las de los últimos 13 años fiscales combinados, según Robert Garcia, el jefe de la Patrulla Fronteriza en ese sector.
Mientras tanto, los cruces ilegales en la frontera entre Estados Unidos y México han disminuido drásticamente este año, alcanzando los niveles más bajos desde septiembre de 2020 en julio, según informó ABC News.
Las autoridades atribuyen esta reducción significativa a los esfuerzos del país Azteca para detener a los migrantes con destino a EE.UU, al aumento de las temperaturas durante el verano y a las medidas restrictivas de Biden sobre el acceso al sistema de asilo estadounidense.