Según un reciente informe de Redfin, uno de cada cinco futuros compradores de viviendas en los Estados Unidos estaría dispuesto a sacrificar su seguridad física para poder adquirir una casa asequible en el próximo año.
La tendencia es particularmente alta entre los jóvenes. De acuerdo con los datos recopilados por la empresa de bienes raíces, el 23.7% de los encuestados de la Generación Z señalaron que estarían dispuestos a comprometer su seguridad por razones económicas.
Pero la disposición a asumir riesgos de seguridad no se limita solo a los jóvenes. El estudio revela que el 18.1% de los Millennials y el 17.5% de Gen Xers también están abiertos a este sacrificio. En contraste, solo el 5.5% de los Baby Boomers consideraría asumir un compromiso similar para ahorrar costos. Esto sugiere un cambio generacional en la percepción de lo que es aceptable en la búsqueda de vivienda accesible.
El informe encargado por Redfin y realizado por Qualtrics en febrero, encuestó a aproximadamente 3.000 propietarios e inquilinos estadounidenses. La escasez en la oferta de viviendas, combinada con los salarios generalmente más bajos de las generaciones más jóvenes, son factores que exacerban el fenómeno.
“Cuando el hogar típico gana menos de lo necesario para comprar o alquilar una casa típica, los compradores de casas no pueden evitar hacer sacrificios”, explica Elijah de la Campa, economista senior de Redfin.
Incremento en costos de vivienda y alquiler
En los últimos años, el costo tanto de alquilar como de comprar una casa ha aumentado drásticamente en los Estados Unidos. A pesar de que el mercado de alquiler no ha sido tan afectado como el de compra, aún presenta desafíos significativos.
Años de construcción insuficiente han contribuido a la escasez de viviendas, un problema que se ha visto agravado por la rápida subida de las tasas hipotecarias y los costos elevados de los materiales de construcción, según reportó FOX Business.
Durante la pandemia, muchos vendedores aseguraron tasas hipotecarias récord bajas de alrededor del 3% o menos, contribuyendo al actual efecto de “esposas doradas” en el mercado inmobiliario, ya que estos propietarios son reacios a vender, limitando aún más la oferta disponible.
La semana pasada, Redfin informó que los alquileres solicitados estaban un 23% por encima de los niveles de junio de 2019, mientras que los pagos hipotecarios habían subido un 90% en comparación con los niveles previos a la pandemia.
Aunque los costos de adquisición de viviendas se suavizaron ligeramente en julio, no fue suficiente para atraer nuevamente a los compradores. La escasez de opciones viables sigue siendo un obstáculo considerable.
“El país debería tomar en cuenta esta lección al considerar cómo mejorar la asequibilidad en el mercado de compra de vivienda: cuando hay más viviendas disponibles, los precios no aumentan tan rápido”, destacó Sheharyar Bokhari, economista senior de Redfin, a FOX Business.