La tormenta tropical Debby, previamente un huracán de categoría 1, ha dejado al menos cinco muertos tras su paso destructor por Florida y Georgia. A pesar de haberse debilitado, sus efectos devastadores continúan afectando el sureste de los Estados Unidos, con pronósticos de intensas lluvias en los próximos días, informó Fox Weather.
Según los reportes de autoridades, Debby tocó tierra el lunes por la mañana cerca de la comunidad de Steinhatchee en la región de Big Bend, Florida, con vientos estimados en 130 km/h.
La combinación de lluvias torrenciales, inundaciones repentinas, vientos dañinos y una peligrosa marejada ciclónica provocó apagones generalizados, afectando a casi 300.000 usuarios en su punto máximo, según PowerOutage.us.
En Florida, al menos cuatro personas, incluidas dos niños, perdieron la vida. BBC informó que “una mujer de 38 años y un niño de 12 años de Crawfordville murieron en un accidente de tránsito en la autopista U.S. 19 debido a las condiciones climáticas adversas y la carretera mojada”.
En el condado de Levy, un niño de 13 años falleció cuando un árbol cayó sobre su casa, mientras que en Hillsborough, un camionero de 64 años perdió la vida cuando su tráiler se salió del control y colisionó contra una barrera de concreto, cayendo posteriormente al agua. Los buzos del departamento del sheriff localizaron la cabina sumergida a unos 12 metros de profundidad, encontrando al conductor sin vida dentro del vehículo.
En Georgia, se reportó una muerte adicional en Colquitt County el lunes por la noche. Según las autoridades, un joven de 19 años falleció cuando un árbol cayó sobre su hogar, al norte de la frontera con Florida.
El Centro Nacional de Huracanes advirtió sobre un panorama “potencialmente mortal” debido a las intensas precipitaciones que se esperan en Georgia, Carolina del Sur y Carolina del Norte hasta mediados de semana. “El ritmo lento de la tormenta podría traer inundaciones catastróficas”, dijo Jamie Rhome, director adjunto de la institución.
El Gobernador de Florida, Ron DeSantis, declaró el estado de emergencia en 61 de los 67 condados del estado. La tormenta Debby, que es la cuarta tormenta con nombre de la temporada, se espera que continúe desplazándose hacia el noreste, azotando la costa y dejando fuertes lluvias en el sureste de Georgia y las Carolinas hasta mediados de semana, antes de moverse tierra adentro cerca de la costa de Carolina del Sur el jueves.
Se estima que el cambio climático podría estar contribuyendo a la mayor frecuencia de huracanes de movimiento lento como Debby, debido a los cambios en las circulaciones atmosféricas que dirigen las tormentas a nivel mundial a medida que el planeta se calienta de manera desigual, según el pronóstico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA).