Un incendio forestal en California, que ya ha consumido más de 48.500 hectáreas, es el mayor siniestro del estado en lo que va del 2024. Las autoridades han identificado al responsable como Ronnie Dean Stout II, un exconvicto y delincuente sexual registrado, quien presuntamente comenzó el fuego al empujar un coche en llamas hacia una quebrada en el Parque Bidwell, cerca de la ciudad de Chico.
Según el New York Post, el fuego se produjo cuando Stout, de 42 años, rodó el vehículo hacia la zona el miércoles 24 de julio a las 15:00 horas. “El auto bajó aproximadamente dieciocho metros por un terraplén y se calcinó por completo, propagando las llamas a las áreas circundantes y provocando evacuaciones masivas en los condados de Butte y Tehama”, indicó la oficina del fiscal del distrito de Butte, mediante un comunicado.
El rápido avance del incendio debido a las fuertes ráfagas de viento obligó a los residentes a evacuar. Las llamas crecieron con rapidez y solo el 3 % del incendio estaba contenido para la noche del jueves, según el New York Post.
Stout fue visto dejando tranquilamente la escena del incendio “mezclándose con los visitantes del parque que huían del fuego”, señalaron las autoridades que investigaron el siniestro.
CNN confirmó que el hombre fue arrestado tras ser identificado por los investigadores de incendios provocados de CalFire y la oficina del fiscal del distrito. “Fue detenido en un parque de casas rodantes en Chico, a las 2 de la mañana”, informó el fiscal Mike Ramsey.
El acusado, quien ya cumplió 20 años de prisión por un robo en 2002, está ahora detenido en la cárcel del condado de Butte sin posibilidad de fianza hasta su comparecencia judicial el lunes.
El fiscal del distrito también reveló a los medios de comunicación que Stout tiene dos condenas anteriores por delitos graves, incluyendo “actos lascivos contra un menor de 14 años en 2001 y robo con gran daño corporal en 2002”.
CNN destacó que, de acuerdo con la ley de “Tres Strikes” de California, podría enfrentar cadena perpetua si es condenado por este presunto incendio provocado debido a sus condenas anteriores por crímenes “serios o violentos”.
Un total de más de 200 bomberos fueron desplegados para luchar contra el fuego, informó CalFire. Las temperaturas extremadamente altas y las fuertes ráfagas de viento alimentaron el crecimiento del incendio, que se extendió a casi 16.200 hectáreas durante la noche, un área aproximadamente del tamaño de Washington, D.C.
Mientras tanto, en el estado de Oregon, un nuevo incendio denominado Durkee Fire está causando estragos, siendo el mayor de los 31 grandes incendios activos en el estado.
“En los últimos días, el incendio de Durkee ha mostrado un comportamiento extremo, incluso creando su propio clima en forma de nubes pirocúmulos”, manifestó Sarah Sherman de la Oficina de Administración de Tierras.
La gobernadora de Oregon, Tina Kotek, describió la situación como “dinámica,” añadiendo: “nos enfrentamos a fuertes vientos erráticos en la región que podrían afectar a todos los incendios. La lluvia no está llegando a través. Algunas comunidades no tienen electricidad.”