El huracán Beryl, que impactó la costa de Texas como una tormenta de categoría 1 el lunes, se ha degradado a un ciclón postropical mientras avanza hacia el noreste de Estados Unidos y Canadá, dejando a su paso una estela de destrucción y persistentes amenazas meteorológicas. Según la Associated Press, el ojo de la tormenta se ubicaba el miércoles al mediodía en el sudeste de Michigan, con vientos máximos sostenidos de 45 km/h (30 mph).
Las autoridades del Servicio Meteorológico Nacional han emitido alertas de inundaciones para múltiples regiones, incluidas partes de Illinois, Indiana, Michigan, Nueva York, Vermont, New Hampshire y Maine. Además, se han emitido advertencias de lluvia fuerte para el sur de Canadá. Se registraron precipitaciones que oscilan entre 7,6 y 15,2 cm (3 y 6 pulgadas) en el norte de Indiana, lo que ha saturado el suelo y aumentado el riesgo de caída de árboles debido a los vientos, informó el meteorólogo Bob Oravec de acuerdo con WSVN.
En Indiana, un tornado tocó tierra el martes en el condado de Posey, causando daños considerables. Según ABC News, el tornado derribó techos, descarriló vagones de tren, dañó casas móviles y destruyó gran parte de un almacén. Afortunadamente, no se reportaron heridos. Jerrod Prather, supervisor de Nutrien Ag Solutions, observó el tornado a través de las cámaras de seguridad, describiendo cómo el embudo bajó, se levantó y luego volvió a descender.
En el estado de Nueva York, otro tornado tocó tierra el miércoles al sur de Buffalo, según la Associated Press. Los videos publicados en redes sociales mostraron escombros arremolinándose bajo un cielo oscuro. El ejecutivo del condado de Erie, Mark Poloncarz, señaló que aunque los daños materiales fueron significativos, no hubo informes de lesiones.
Los riesgos de fuertes lluvias e inundaciones se han extendido desde los Grandes Lagos hasta Nueva Inglaterra, incluyendo al sur de Canadá, según ABC News. En Vermont, los habitantes se prepararon para posibles inundaciones repentinas, justo en el aniversario de las catastróficas inundaciones del pasado mes de julio. Aunque el Servicio Meteorológico Nacional aclaró que la tormenta actual no tendrá el mismo nivel de devastación, sigue representando un peligro considerable.
Gran parte de Vermont estuvo bajo alerta de tornado hasta las 9 p.m. del miércoles, mientras equipos de rescate y la Guardia Nacional se mantenían listos para actuar en caso de emergencia, informó Vermont Emergency Management de acuerdo con Associated Press.
Beryl ha dejado a millones de personas sin electricidad en distintas regiones. En Texas, más de 1,6 millones de hogares y negocios seguían sin suministro eléctrico el miércoles, una reducción desde el pico de 2,7 millones registrado el lunes, según PowerOutage.us. Decenas de miles de clientes también quedaron sin electricidad en Michigan, Ohio y Nueva York, reportó Associated Press.
Hasta ahora, Beryl ha sido responsable de al menos 18 fallecimientos: siete en Estados Unidos (una en Luisiana y seis en Texas) y 11 en el Caribe, informó la Associated Press. Los daños materiales han sido significativos, incluyendo techos arrancados, vagones de tren descarrilados y estructuras colapsadas.
Otras áreas del noreste, como Nueva Inglaterra, también sufrieron los efectos de la tormenta. Las fuertes lluvias pronosticadas para el miércoles amenazaron con inundar partes del norte del estado de Nueva York y Nueva Inglaterra, dijo Bob Oravec del Servicio Meteorológico Nacional, de acuerdo con ABC News. Aunque se espera que la tormenta disminuya su intensidad después del jueves, con lluvias dispersas en la región, las autoridades se mantienen en alerta.
El sur de Canadá también ha recibido advertencias de fuertes lluvias. Según informes internacionales, las precipitaciones y vientos fuertes podrían prolongarse en algunas áreas.
La trayectoria de los remanentes de Beryl enfatiza la necesidad de mantenerse preparados y alerta ante eventos climatológicos inesperados. La colaboración entre agencias meteorológicas y equipos de emergencia ha sido crucial en la gestión de las respuestas a las amenazas que esta tormenta ha planteado a lo largo de su recorrido.