El régimen iraní está alentando de forma encubierta las protestas estadounidenses por la guerra en Gaza, en un intento de avivar la indignación antes de las elecciones de fin de año, según declaró el martes la máxima funcionaria de inteligencia del país.
Utilizando redes sociales populares en Estados Unidos, grupos vinculados a Teherán se han hecho pasar por activistas en línea, han alentado protestas y han proporcionado apoyo financiero a algunos grupos de protesta, dijo en un comunicado la directora de Inteligencia Nacional, Avril Haines.
“Irán es cada vez más agresivo en sus labores de influencia exterior, y busca avivar la discordia y socavar la confianza en nuestras instituciones democráticas”, afirmó Haines.
Este esfuerzo, señalado por la máxima funcionaria de los servicios de inteligencia estadounidenses, es la última prueba de que los adversarios de Estados Unidos están aprovechando internet para distorsionar los debates internos y ampliar las divisiones políticas antes de las elecciones.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que era importante advertir a los estadounidenses para ayudarles a “protegerse de los intentos de potencias extranjeras de aprovecharse o cooptar sus actividades legítimas de protesta”.
También advirtió a Irán que “inmiscuirse en nuestra política y tratar de atizar la división es inaceptable”.
Campañas de influencia online
En los últimos años, Irán, Rusia y China han refinado su capacidad de utilizar bots en línea y redes de cuentas falsas en las redes sociales para amplificar debates divisivos en Estados Unidos sobre inmigración, tiroteos de la policía, el COVID-19, catástrofes medioambientales e incluso globos espía chinos.
En la mayoría de los casos, estas campañas de influencia explotan conflictos sociales existentes, y Haines señaló el martes que los estadounidenses que participan en protestas por la conducta de Israel en Gaza tienen derecho a expresar sus opiniones. Pero dijo que los estadounidenses necesitan saber cuando actores extranjeros están tratando de inmiscuirse en la política interna de Estados Unidos.
“Los estadounidenses que están siendo objeto de esta campaña iraní pueden no ser conscientes de que están interactuando o recibiendo apoyo de un gobierno extranjero”, dijo Haines.
Las manifestaciones por la ofensiva israelí en Gaza surgieron en los campus universitarios de todo el país en los últimos meses. Las protestas se convirtieron rápidamente en un factor de las campañas políticas y suscitaron preocupación por el antisemitismo y el papel de “agitadores externos”, así como inquietud por un conflicto regional más amplio entre Israel e Irán.
Alerta sobre la IA y desinformación rusa
Irán no es el único país que intenta influir en el discurso estadounidense de cara a las elecciones de 2024. Durante una reunión con periodistas el martes, funcionarios de inteligencia dijeron que los adversarios de Estados Unidos tratarán de aprovechar la más avanzada inteligencia artificial para ampliar drásticamente el alcance y la penetración de la desinformación electoral.
Los funcionarios —de agencias como el FBI y la oficina de la directora de Inteligencia Nacional— hablaron con los periodistas bajo condición de anonimato en apego a las normas básicas establecidas por la oficina del director.
Rusia sigue siendo la mayor amenaza, según los funcionarios, que afirmaron que el Kremlin está organizando un plan gubernamental para difundir desinformación electoral de cara a las elecciones de 2024. Rusia ya ha intentado explotar las polémicas sobre la inmigración como parte de su estrategia para socavar el apoyo internacional a Ucrania.
Rusia también está tratando de cubrir sus huellas mediante el blanqueo de su desinformación a través de sitios de noticias supuestamente independientes e influencers estadounidenses que pueden no saber que están repitiendo argumentos rusos.
Los funcionarios se negaron a responder directamente cuando se les preguntó si Rusia prefería a un candidato presidencial en particular, pero señalaron que la preferencia del país se mantuvo sin cambios desde ciclos electorales anteriores, cuando la inteligencia estadounidense consideró que Rusia había hecho esfuerzos para tratar de que el candidato republicano Donald Trump fuera elegido.
China, más cauta
Si bien en las elecciones de Taiwán China llevó a cabo una amplia campaña de desinformación, este año se ha mostrado más cauta a la hora de desinformar a los estadounidenses. Los funcionarios dijeron el martes que China no muestra indicios de que vaya a tratar de influir en la contienda presidencial.
China, dijo un funcionario, no ve ninguna ventaja en elegir entre los dos candidatos, ya que ambos parecen intentar frenar su poder.
El senador Mark Warner, presidente de la Comisión de Inteligencia del Senado, ha dicho que Estados Unidos puede ser más vulnerable a la desinformación extranjera este año que antes de las elecciones de 2020. Agradeció a los servicios de inteligencia la celebración de la sesión informativa del martes para comunicar al público la amenaza.
“Las redes sociales, en particular, siguen siendo un vector popular para los intentos de influencia encubierta extranjera, y nuestros adversarios siguen enfocados en avivar las tensiones sociales, raciales y políticas entre los estadounidenses”, dijo Warner.
(Con información de AP)