El presidente estadounidense, Joe Biden, encabezó este viernes un acto de campaña en Carolina del Norte, horas después de que se realizara el primer debate contra su rival republicano, Donald Trump. En su presentación, el mandatario desestimó los comentarios negativos en su contra y, por el contrario, reafirmó su candidatura.
“Estoy en Carolina del Norte por una razón, porque tengo la intención de ganar en este estado en noviembre. Si ganamos aquí, ganaremos las elecciones”, dijo con convicción mientras los allí presentes coreaban “cuatro años más”, en señal de apoyo a su reelección.
A continuación, Biden, de 81 años, abordó los recientes cuestionamientos sobre su avanzada edad y su capacidad para estar al frente del país durante un nuevo mandato y reconoció que, si bien “no ando tan bien como antes, no hablo tan bien como antes, no debato tan bien como antes, sé lo que se me da bien… sé cómo decir la verdad”.
“No me presentaría de nuevo si no creyera con todo mi corazón y mi alma que puedo hacer el trabajo… hay demasiado en juego”, insistió.
Por el contrario, cargó contra Trump y aseguró que su retorno a la Casa Blanca representaría un grave retroceso para el país ya que “destruirá la democracia”. “¿Vamos a dejar que ataque de nuevo nuestra democracia?”, cuestionó a continuación y refutó: “No lo creo, yo la defenderé”.
Asimismo, aseguró que su rival “batió un nuevo récord de mentiras en un sólo debate” ya que estuvo “90 minutos debatiendo con un tipo que tiene la moral de un gato callejero”, en referencia a una expresión que utilizó la víspera durante sus intervenciones.
Con estas declaraciones, Biden buscó llevar tranquilidad a los seguidores demócratas y disuadir a aquellos políticos del partido que comenzaron a cuestionarse la posibilidad de buscar un reemplazo para la boleta del próximo 5 de noviembre. Sin embargo, analistas han advertido que esta alternativa plantea varios riesgos y, de realizarse, debe ocurrir antes de la convención del partido, que comenzará el 19 de agosto.
De todas formas, hay un gran bando demócrata que aún confía en él y que se mantiene firme en su apoyo a la fórmula actual.
“Nunca le daré la espalda al presidente Biden y no conozco a ningún demócrata de mi partido que haría eso”, dijo el gobernador de California, Gavin Newsom, luego de que su nombre figurara en varias listas como el posible reemplazante. También, la es secretaria de Estado y ex candidata presidencial por su partido Hillary Clinton sostuvo que “estas elecciones siguen siendo muy sencillas, se trata de elegir entre alguien que se preocupa por usted (sus derechos, sus perspectivas, su futuro) y alguien que sólo lo hace por sí mismo. Votaré por Biden”.
En esa misma línea, el ex presidente Barack Obama escribió en su cuenta de X que “las malas noches de debate ocurren”, en referencia a su propia mala actuación en 2012, pero agregó: “Confía en mí, lo sé”. Además, retomó la idea se Clinton y sostuvo que el voto en noviembre se debatirá entre “alguien que dice la verdad, que distingue el bien del mal... y alguien que miente descaradamente para su propio beneficio”. “Anoche, eso no cambió y por eso hay tanto en juego en noviembre”, concluyó.
La primera dama, Jill Biden, también lo defendió y rechazó que haya tenido un desempeño pobre este jueves.
“Ayer vieron a Joe Biden, un presidente con integridad y personalidad, que dijo la verdad. Joe ha ayudado a curar a nuestro país y nos está ayudando a todos a recuperarnos del caos de la anterior Administración”, dijo luciendo un vestido negro estampado con la palabra VOTE (vota) en blanco.
(Con información de AFP, EFE y Europa Press)