Un rasgo clave distingue a las personas exitosas en sus respectivos campos, desde ejecutivos de grandes corporaciones hasta premios Nobel: la adaptabilidad. Esta es la conclusión de Joseph Fuller, profesor de la Escuela de Negocios de Harvard, quien ha dedicado una década a estudiar y trabajar con personas destacadas en diversos sectores. Fuller compartió sus hallazgos con CNBC, revelando que la adaptabilidad, más que la confianza o la visión para los negocios, es lo que realmente diferencia a estas personas.
Según Fuller, las personas altamente exitosas no se mantienen rígidas en una trayectoria profesional específica que trazaron en su juventud. En lugar de ello, están abiertas a oportunidades inesperadas y aceptan el cambio como parte de su crecimiento personal y profesional. “No están apegados a una carrera profesional predeterminada que establecieron cuando eran estudiantes o comenzaron su primer trabajo”, explicó Fuller a CNBC.
Fuller subrayó que, mientras es beneficioso establecer objetivos y cronogramas profesionales, existe el peligro de ser demasiado inflexible. Tal rigidez puede llevar a perder oportunidades que podrían haber sido altamente satisfactorias. “El peligro es inclinarse tanto hacia sus preferencias que quede cerrado a un desvío repentino o a un camino no lineal”, advirtió Fuller.
Un ejemplo que ilustra este punto es la posibilidad de rechazar un trabajo en una pequeña startup emocionante y bien remunerada, simplemente porque se tiene el objetivo previo de trabajar para una gran empresa. Otra situación hipotética sería sentir la tentación de buscar un nuevo empleo debido a la falta de ascensos rápidos, pese a estar satisfecho con el puesto actual. “En ambos casos, estás ignorando lo que te motiva o te interesa y, en cambio, dejas que expectativas rígidas guíen tu carrera”, explicó Fuller.
Investigaciones recientes de LinkedIn respaldan esta visión sobre la importancia de la adaptabilidad. Un informe de LinkedIn indica que la demanda de empleados flexibles y resilientes ha aumentado considerablemente en diversas industrias, especialmente en el contexto de los cambios en la fuerza laboral pospandemia. Estos cambios incluyen el auge de la inteligencia artificial, la adopción generalizada del trabajo remoto e híbrido y la interacción de cinco generaciones distintas, cada una con sus propios estilos de comunicación y jerga laboral.
Aneesh Raman, vicepresidente de LinkedIn, comentó en el informe que tener capacidad de adaptación es crucial para navegar el entorno laboral moderno. “La adaptabilidad es la mejor manera de tener capacidad de acción en este momento”, afirmó Raman. “La esencia de la gestión del cambio es desarrollar ese músculo de adaptabilidad”.
Pese a su importancia y demanda creciente, Fuller señala que la adaptabilidad es una habilidad que puede ser complicada de encontrar. “La gente tiene miedo de probar cosas nuevas y fracasar. Pero no puedes crecer sin salir de tu zona de confort”, comentó. La resistencia al cambio es común y actúa como un freno al desarrollo personal y profesional.
La relevancia de la adaptabilidad se refleja en el interés de los empleadores por contratar personas que puedan adaptarse rápidamente a los cambios en curso. Estos cambios abarcan desde la integración de nuevas tecnologías hasta la evolución de las estructuras laborales y las preferencias de trabajo. “Los empleadores quieren contratar personas que puedan adaptarse rápidamente a estos cambios en curso”, añadió Raman.
Finalmente, tanto Fuller como LinkedIn subrayan que, a pesar de ser una habilidad escasa, la adaptabilidad puede desarrollarse y potenciarse. Este rasgo no solo mejora las oportunidades laborales, sino que también facilita una carrera más satisfactoria y dinámica. La disposición a aceptar el cambio y explorar nuevas oportunidades puede ser, según estos expertos, el verdadero diferenciador en la carrera profesional de cualquier individuo.