Tras varios retrasos, el primer vuelo tripulado de la cápsula Starliner de Boeing se lanzará el miércoles 5 de junio, según confirmó la NASA. El lanzamiento está programado para las 10:52 a.m., hora del este, desde el Complejo de Lanzamiento Espacial-41 en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida (Estados Unidos).
El lanzamiento originalmente programado para el sábado 1 de junio fue cancelado pocos minutos antes de su inicio debido a un problema con el secuenciador de lanzamiento en tierra que no cargó en la configuración operativa correcta.
La agencia espacial estadounidense explicó que “el secuenciador de lanzamiento terrestre de la computadora no se cargó en la configuración operativa correcta después de proceder a la cuenta terminal”, según confirmó ABC News.
La United Launch Alliance (ULA), que fabrica y opera los cohetes que lanzan la cápsula al espacio, trabajó hasta el domingo para evaluar el equipo de soporte en tierra, que presentó fallos durante el conteo regresivo. Se identificó un problema con una fuente de alimentación en una de las tres unidades redundantes que alimentan las tarjetas de computadora que controlan varios sistemas.
Todas las unidades son necesarias para garantizar la seguridad de la tripulación durante la fase terminal de dicho conteo.
El domingo, la unidad con el problema fue retirada, inspeccionada y reemplazada por una unidad de repuesto. No se encontraron signos de daño físico, y se completaron comprobaciones funcionales del nuevo chasis y las tarjetas, confirmando que todo el hardware funciona normalmente. Un análisis completo de la falla se llevará a cabo para entender mejor la causa raíz del problema.
El Starliner, capaz de transportar hasta siete personas, realizará un viaje de aproximadamente 24 horas hacia la Estación Espacial Internacional (ISS). Sin embargo, en esta misión de prueba solo viajarán dos astronautas de la NASA: Barry Wilmore, de 61 años, y Sunita Williams, de 58 años. Los astronautas pasarán una semana a bordo de la ISS, evaluando la cápsula y sus sistemas.
Los problemas con el lanzamiento del sábado se suman a una serie de retrasos previos. El lanzamiento estaba inicialmente programado para el 6 de mayo, pero se pospuso debido a un problema con una válvula de oxígeno en un cohete de United Launch Alliance. Posteriormente, el 25 de mayo, una fuga de helio en el módulo de servicio obligó a reprogramar el lanzamiento nuevamente, según publicó la agencia AP.
Si la misión es exitosa, la NASA podría certificar el Starliner para realizar misiones rutinarias hacia y desde la ISS. Hasta ahora, la agencia espacial estadounidense ha utilizado principalmente la cápsula Dragon de SpaceX para transportar tripulaciones y carga a la estación espacial.
Estas misiones forman parte del Programa de Tripulación Comercial de NASA, que tiene como objetivo usar cohetes y cápsulas estadounidenses para enviar astronautas y carga a la ISS, preparándose así para futuras misiones a la Luna y Marte.
La NASA otorgó a Boeing un contrato de 4.200 millones de dólares para desarrollar el Starliner, pero debido a los retrasos, la compañía ha enfrentado pérdidas cercanas a los 1.500 millones de dólares.