La fiscal general de Florida, Ashley Moody, ha solicitado una investigación sobre las prácticas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) del gigante de las cafeterías Starbucks. Este movimiento surgió en un contexto de creciente oposición a estas iniciativas en diferentes sectores. La autoridad hizo un llamado a la Comisión de Relaciones Humanas de Florida para que examine si estas políticas cumplen con las leyes antidiscriminatorias del estado, informó USA Today.
Durante una aparición en el programa de radio de Sean Hannity, que fue presentado por el gobernador Ron DeSantis, Moody expresó sus preocupaciones, al argumentar que “tantas de estas políticas DEI que se han impulsado en la corporativa estadounidense, que estaban destinadas a abordar y prevenir la discriminación, ahora están empujando políticas y programas que podrían ser prácticas de empleo ilegales, de hecho, volviéndose discriminatorias ellas mismas”.
El gobernador DeSantis, quien firmó una ley el año pasado que prohíbe estas iniciativas en las universidades estatales, agradeció a la fiscal por su labor: “Debes tratar a las personas como individuos, juzgarlas basándote en el contenido de su carácter, no en el color de su piel ni en su etnia ni en nada así”.
La Comisión de Relaciones Humanas de Florida, establecida hace décadas para hacer cumplir la Ley de Derechos Civiles de Florida y abordar problemas de discriminación, ha sido la encargada de llevar a cabo esta investigación. Hasta ahora, ni la Comisión ni Starbucks han respondido a las solicitudes de comentarios de diversos medios, incluyendo el Tallahassee Democrat, parte de la red de USA TODAY.
En el transcurso de los últimos años, los legisladores republicanos en todo el país han buscado desmantelar los programas de DEI en la educación superior y en el mundo corporativo. Según The Chronicle of Higher Education, desde el año pasado se han presentado alrededor de 85 leyes anti-DEI en 28 estados, de las cuales 13 han sido aprobadas.
Según Fox 13, en la demanda Moody acusó a la empresa de tener políticas que “a simple vista parecen discriminar por motivos de raza”. Señaló una parte del sitio web de Starbucks que menciona los objetivos anuales de inclusión y diversidad de la compañía. También mencionó que los bonus ejecutivos estaban vinculados a estos objetivos DEI.
Sin embargo, a principios de este año, los inversores de la compañía, en una votación no vinculante, aprobaron un plan para eliminar los bonus ejecutivos relacionados con las metas DEI.
Mientras tanto, la atención se ha centrado en la reciente decisión de un tribunal federal de apelaciones que permitió bloquear una disposición clave de la ley “Stop WOKE Act” de Florida. Esta disposición restringía las prácticas y capacitaciones de diversidad en las empresas, bloqueando conceptos que podrían hacer que los empleados sintieran “responsabilidad personal” por acciones cometidas en el pasado por alguien de la “misma raza, color, sexo u origen nacional”.
Starbucks, por su parte, promociona en una página web separada su compromiso con la diversidad e inclusión, señalando que tiene un currículo anti-prejuicios, equidad salarial y que está trabajando para “mejorar nuestros esfuerzos para llegar a una mayor variedad de candidatos y captar talento que aporte nuevas perspectivas y experiencias para mejorar nuestro negocio y lugar de trabajo”.