El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, manifestó este domingo al ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, el “férreo compromiso” de EEUU con la seguridad de Israel, pero dejó clara su oposición a una operación militar terrestre en Rafah, en la Franja de Gaza.
Durante la llamada de Blinken a Gallant abordaron la situación en la Franja de Gaza, “los esfuerzos en curso para asegurar la liberación de los rehenes” y el objetivo compartido de derrotar a Hamas, indicó el Departamento de Estado en un comunicado.
No obstante, el secretario de Estado de EEUU reafirmó la “oposición de Estados Unidos a una importante operación militar terrestre” en el área sureña de Rafah, donde se han refugiado más de un millón de personas.
Blinken subrayó la necesidad imperiosa de “proteger a los civiles y a los trabajadores humanitarios” en Gaza, e instó a Gallant a “garantizar” que la asistencia humanitaria pueda llegar a Gaza y ser distribuida, mientras Israel persigue a Hamas.
La situación en la ciudad sureña de Rafah, convertida en el último refugio para los gazatíes, cada vez es más crítica después de que este fin de semana el Ejército impusiera nuevos desplazamientos forzosos para una población que no tiene a dónde ir.
Al mismo tiempo, Israel sigue manteniendo cerrado el paso de Rafah, crucial para la entrada de ayuda humanitaria y por donde los enfermos crónicos y los heridos salían para ser tratados, aunque este lunes anunció la apertura de un paso nuevo en el norte de la Franja.
Alertas por los riegos en Rafah
Para Estados Unidos, una gran ofensiva de Israel en Rafah, en el sur de Gaza, provocaría “caos” y “anarquía” pero no eliminaría a Hamas, advirtió el domingo el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, quien señaló que la guerra ha matado más civiles que miembros de ese movimiento islamista palestino.
El plan de Israel en Rafah “corre el riesgo de provocar enormes daños en la población civil sin resolver el problema”, estimó el secretario de Estado en una entrevista con la cadena televisiva CBS.
Una operación israelí en Rafah podría crear “caos” y “anarquía” y, tras cierto tiempo, el regreso de la organización islamista, insistió.
“Hemos visto a Hamas regresar a las zonas que Israel liberó en el norte, incluso en Khan Younis”, ciudad en ruinas cerca de Rafah, aseguró el responsable estadounidense.
A la pregunta de si Washington consideraba que en Gaza habían muerto más civiles que combatientes de Hamas, Blinken respondió “sí” a la estación de televisión estadounidense.
Estados Unidos amenazó de manera pública con suspender la entrega de ciertos tipos de armas a Israel, por ejemplo obuses de artillería, si ese país lanza una gran ofensiva en la sobrepoblada Rafah, a la que se opone el presidente Joe Biden.
Estas preocupaciones fueron reiteradas por el asesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan durante una reunión telefónica mantenida este domingo con su homólogo israelí, Tzachi Hanegbi, según un comunicado de la Casa Blanca.
De acuerdo al responsable estadounidense, Hanegbi confirmó que Israel estaba “teniendo plenamente en cuenta las preocupaciones de Estados Unidos”.
(Con información de EFE y AFP)