Tras años de retrasos y un presupuesto que se excedió por más de mil millones de dólares, la cápsula Starliner de Boeing está lista para su primer vuelo tripulado hacia la Estación Espacial Internacional (EEI), marcando un momento crucial para la compañía y para la NASA.
Se trata del primer vuelo tripulado de la cápsula Starliner, en el cual dos pilotos de la Agencia Espacial Estadounidense realizarán una prueba crítica del vehículo durante una estancia de una semana en la estación. Esta misión busca demostrar una alternativa al ya operativo Crew Dragon de SpaceX, que hasta la fecha ha lanzado 50 astronautas, cosmonautas y civiles al espacio en 13 vuelos tripulados desde mayo de 2020.
A diferencia de SpaceX, Boeing ha enfrentado numerosos problemas técnicos que han requerido un extenso trabajo de rehacer y una prueba adicional sin tripulantes para resolver. Sin embargo, los gestores de la misión aseguran que todos los problemas conocidos fueron corregidos y que la nave fue sometida a múltiples mejoras y pruebas exhaustivas para verificar su capacidad de llevar y traer astronautas de manera segura desde la EEI.
La misión de demostración de la tripulación está programada para un lanzamiento nocturno el lunes 6 de mayo, marcando un momento crucial tanto para Boeing como para la NASA, con la expectativa de alternar misiones futuras entre Boeing y SpaceX, según confirmó la agencia de noticias The Associated Press.
Los astronautas al mando de la Starliner, ambos pilotos de pruebas de la Marina y veteranos del espacio, expresan su confianza en la misión. Barry “Butch” Wilmore, comandante de la misión, afirmó tener “plena confianza en la gestión que toma las decisiones... Eso es pasado. Eso no es ahora”.
Por su parte, la copiloto Sunita Williams destacó el aprendizaje obtenido de las experiencias previas, asegurando, que “no diríamos que estamos listos si no lo estuviéramos”. El lanzamiento está programado desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, consolidándose como la primera vez que astronautas serán lanzados usando un cohete Atlas desde la última misión Mercury hace más de 60 años, publicó CBS News.
La nave
El Atlas 5, equipado con un motor de primera etapa RD-180 construido en Rusia, fue calificado para vuelos tripulados, destacando por sus componentes de alta fiabilidad y un avanzado sistema de detección de fallas de emergencia diseñado para asegurar una escapada segura en caso de fallo inminente durante el lanzamiento.
Así mismo, Starliner cuenta con motores de aborto poderosos y sistemas que permiten a Wilmore y Williams, si es necesario, desencadenar manualmente un aborto, así como proporcionar control manual directo en caso de complicaciones durante el lanzamiento o en órbita.
El vuelo del Starliner no solo es un logro para Boeing sino también para el Programa de Tripulación Comercial de la NASA, que tras retirar el transbordador espacial, asignó contratos a SpaceX y Boeing con el objetivo de reanudar el lanzamiento de astronautas estadounidenses desde suelo estadounidense y asegurar un acceso redundante a la EEI.
Mientras SpaceX logró sus objetivos de volar con éxito astronautas al espacio, Boeing busca demostrar con esta misión que también es capaz de cumplir con el mismo compromiso. Un éxito en esta misión no sólo validaría la inversión de Boeing de más de mil millones de dólares para superar los obstáculos técnicos encontrados sino que además consolidaría su posición como un participante vital en el futuro del transporte espacial humano.
Asumiendo que el lanzamiento y la misión transcurran sin problemas, Wilmore y Williams supervisarán un encuentro mayormente automatizado con la EEI, demostrando la habilidad de la nave de llevar a cabo la trayectoria de vuelo requerida e intervenir después de una falla mayor si fuese necesario.
Se espera que la Starliner aterrice en terreno, utilizando paracaídas y bolsas de aire para suavizar el impacto, una característica que la distingue de la Crew Dragon de SpaceX. Este aterrizaje está previsto en el White Sands Space Harbor en Nuevo México, sujeto a condiciones climáticas favorables.